
Mauricio Macri declara este mediodía en el juzgado de Dolores en el marco de la causa por el presunto espionaje ilegal a los familiares de los tripulantes del ARA San Juan.
Luego de que el Juez Martín Bava fuera ratificado por la Cámara Federal de Mar del Plata, finalmente Macri se presentará a brindar declaración indagatoria, aunque manifestó que se trata de una maniobra política para desprestigiaro. Por supuesto, los familiares de las victimas del submarino hundido en 2017 no opinan lo mismo.
Se trata de la primera presentación ante la justicia que Macri tendrá que enfrentar luego de haber abandonado el Poder Ejecutivo, a fines de 2019.
Ante la primera citación, el ex presidente se encontraba en el exterior. En la segunda, y a pesar de haber dicho dos tweets antes de que «siempre iba a estar a disposición de la justicia», manifestó que no iba a presentarse, en un hilo de su cuenta de Twitter.
La causa tiene procesados, además, a Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, números uno y dos de la AFI respectivamente, en épocas de gobierno macrista.
El ex mandatario se defendió de la acusación que recae sobre él argumentando que él «nunca» espió ni mandó a espiar a nadie. El chiste se cuenta solo.
Para hacer todavía más estrafalaria la defensa, el macrismo decidió montar un show a pocos metros del juzgado, donde realizará una movilización de «militantes» y dirigentes del Pro en apoyo a Mauricio Macri, quien será uno de los oradores del acto.
Estarán presentes figurones como Patricia Bullrich, Fernando Iglesias, Jorge Macri y Hernán Lombardi. La UCR, aunque no movilizará, estará representada con la presencia de Luis Naidenoff. En el acto, los dirigentes cambiemitas denunciaran una «persecución judicial» por parte del kirchnerismo contra Macri. A nada de denunciar Lawfare.
Los grandes ausentes en la jornada de apoyo a Macri serán María Eugenia Vidal, Diego Santilli y Horacio Rodríguez Larreta. Los tres se excusaron por estar «comprometidos con actividades de campaña». Se ve que no pudieron hacerse ni un rato para ir a acompañar al líder político de su espacio, si es que todavía le cabe ese calificativo. En algo tienen razón: la campaña no les permite mostrarse demasiado cercanos a Macri. Y eso que Larreta ni siquiera es candidato.






