
En horas de la mañana del viernes, justo en el momento en que los Trabajadores de la ex Imprenta Pellerano se disponían a comenzar con el trabajo cotidiano irrumpió en la planta un escuadrón de la guardia de infantería y del grupo GAD de la policía de la Provincia de Buenos Aires a dar cumplimiento con una orden de desalojo de un Juez de Garantías local.
La imprenta se encontraba trabajando bajo la gestión de sus trabajadores desde el año 2017 cuando los dueños de la misma la familia Pellerano intentó cerrarla fin de semana mediante llevándose parte de las maquinarias y herramientas, totalmente a espaldas de los trabajadores a los que les adeudaba salarios. En ese entonces los trabajadores que retornaban a su trabajo un día lunes se encontraron con la novedad de que los dueños y parte de sus elementos de trabajo ya no estaban. Fue ahí cuando ante el abandono empresarial decidieron poner en marcha nuevamente el taller gráfico bajo su gestión asesorados por su sindicato y realizando las distintas presentaciones legales.

A casi dos años de este suceso, con la imprenta funcionando es que nuevamente se presenta la patronal, y orden judicial mediante se instalan en el interior de la planta, dejando a los Trabajadores afuera. Es por ello que desde el Nuevo MAS Quilmes y la Corriente Sindical 18 de Diciembre nos solidarizamos y apoyamos el acampe que los Trabajadores de la ex Imprenta Pellerano instalaron en las puertas de la misma y repudiamos la orden de desalojo y la presencia policial. Exigimos que los Trabajadores vuelvan a trabajar.
Corriente sindical 18 de Diciembre, Quilmes






