En una crisis edilicia que parece no tocar fondo, los trabajadores del Hospital de Quilmes nucleados en CICOP con apoyo de lxs autoconvocados, cerraron la guardia durante este miércoles denunciando que no estaban dadas las condiciones para atender a los pacientes.

El abandono del Hospital viene de larga data, pero día a día el deterioro dificulta más realizar tareas básicas para la atención de pacientes. Hace unos días se rompió un caño en un pabellón del 2° piso que inundó 4 pisos generando un verdadero caos ya que hubo que trasladar pacientes, se perdió medicación etc. Lejos de terminar el desastre así como más de 100 mil usuarios se encuentran con cortes de luz hace días, esta situación también se vive en el Hospital. Los trabajadores nucleados en CICOP así como lxs autoconvocadxs denuncian las fallas en el grupo electrógeno haciendo que la luz se corte cada dos por tres, afectando el uso de quirófanos, el funcionamiento de tomógrafos y máquinas que son sostén vital para sus pacientes.

Los trabajadores organizados en CICOP advirtieron a IzquierdaWeb que es imposible desarrollar sus labores básicas ya que falta luz y también agua les impide realizar procedimientos elementales como lavarse las manos entre paciente y paciente. Es por eso que, ante esta situación y la falta de respuesta por parte de la dirección del Hospital, tomaron la decisión de cerrar la guardia.

Gracias a esta organización lograron que rápidamente Edesur reparara (vaya uno a saber por cuánto tiempo) el grupo electrógeno. Sin embargo, los trabajadores mencionan que están en un estado de alerta permanente es que las respuestas de la dirección y el gobierno son completamente insuficientes.

Esta situación se torna inhumana para los trabajadores, que le ponen el cuerpo intentando resolver este caos para brindar la mejor atención, y para los pacientes de la salud pública, que ven demorada su atención o directamente imposibilitada.

Si esto ha llegado a este nivel es sin duda por el abandono de los distintos gobiernos a la salud pública, sólo empeorado por este gobierno sometido a los dictámenes del FMI y el pago de la deuda. Por eso, debemos rodear de solidaridad a los y las trabajadoras de la salud y nos ponemos a disposición de las medidas que tomen para exigirle a Mayra Mendoza, Axel Kicillof y el gobierno del Frente de Todos que frenen el vaciamiento de la salud pública.