Pocas veces ha habido motivos tan claros para echar a una alta funcionaria. No solo por lo que dijo tan suelta de cuerpo como si fuera una cosa obvia. También por la concepción que hay detrás acerca de los chicos de los sectores populares y su política hacia los colegios.

En una entrevista en Radio Rivadavia, dijo que es «muy tarde para salir a buscar a los chicos» porque «seguramente ya están perdidos en un pasillo de una villa, ya cayeron en actividades del narcotráfico, ya tuvieron que ponerse a trabajar o perdieron su propia fe respecto de las oportunidades de estudiar».

Entonces, los pibes que tienen una vida algo más difícil e ir al Newman es algo completamente impensable por más de un motivo deben ser vistos con miedo y desprecio. Son, naturalmente, «villeros» y narcos».

Como si eso no fuera suficiente, además la política defendida por la Ministra no deja mucho margen de dudas: hay que abandonar a los pibes a su suerte. De paso, la administración de Larreta se ahorra algunos pesos en colegios y docentes.

Reforzar la capacidad edilicia, de conexión a internet, la llegada a los barrios de los colegios y el personal docente están totalmente fuera de su perspectiva. Su política educativa es esperar la oportunidad de meter presos a los pibes porque son narcos y villeros. Y se trata, no olvidar, de una Ministra de Educación. ¿Puede acaso haber algo más despreciable?

No es la primera vez que esta cheta que desconoce completamente lo más básico de la existencia de las amplias mayorías, la más elemental dificultad para subsistir, vuelca su odio de clase hacia quienes en teoría debería conducir y dirigir educativamente.

En noviembre de 2020 había dirigido su odio de clase también a los docentes. Lo hizo en un video en vivo en redes sociales. Los docentes “empiezan a estudiar la carrera docente, y esto es igual en todo el país porque se refleja también en las encuestas el Ministerio de Educación de la Nación, son personas cada vez más grandes de edad, que eligen la carrera docente como tercera o cuarta opción luego de haber fracasado en otras carreras”.

“Negros zurdos y pobres que forman a otros negros zurdos y pobres, ¿porque permitimos este atropello al orden?” parecía querer decir Acuña. Ésta afirma que “no debiera ser un determinante, pero si uno mira en términos de capital cultural y de experiencias enriquecedoras al momento de aportar en el aula, la verdad que son de los sectores cada vez más bajos socioeconómicos los que eligen estudiar la carrera docente”.

El referente del Nuevo MAS Héctor Chino Héberling declaró en sus redes sociales: