La crisis del coronavirus se acentúa en todo el país producto de la política pro patronal y empresarios de Alberto Fernández. Axel Kicillof solo se ha mantenido en sintonía con el presidente y dejó todas las fábricas (incluidas las no esenciales) en funcionamiento a pesar de ser el principal foco de contagio. Es por ello que la supuesta vuelta a una cuarentena “estricta” no sirvió, básicamente porque nunca fue tal. Una vez más se ha evidenciado el carácter liberal y el abandono de todo lo “social”.
Los resultados están a la vista. En el día de ayer se registraron 5939 casos, de los cuales 4167 pertenecen a la provincia de Buenos Aires. De esta forma alcanzó el impactante número de 102.395 infectados, prácticamente duplica a los de CABA (56.248) Además hubo 69 muertes por lo que la cantidad total es de 1669. La tasa de letalidad continúa en el 1,63%. Por otro lado el lapso de tiempo de duplicación de contagiados (del cuanto tanto hablan tanto Fernández como Kicillof) se encuentra en 16,6 días. Mientras dicha cifra siga bajando la potencialidad de generar un verdadero descontrol en el sistema de salud es verdaderamente alto.
Dentro del Gran Buenos Aires la localidad más afectada es La Matanza. Cuenta con 13.882 casos y es realmente el epicentro de la pandemia en la provincia. Le sigue Quilmes (7438), Lomas de Zamora (5640), Lanús (5191) y Avellaneda (4913). La proximidad entre estos cuatro lugares también explica parte la escalada. En cuanto a las muertes la ciudad que tiene como intendente a Fernando Espinoza también es la del número más alto con 208. Lomas tiene 112 y General San Martín 105.
El promedio de edad de los contagiados es de 36 años y cada vez son menos las porciones de la provincia sin casos positivos. La gran mayoría han respondido a la demanda de los empresarios sin ni si quiera establecer los protocolos necesarios para los lugares de trabajo esenciales. La presión sanitaria por parte de los trabajadores existe ya que nadie se quiere contagiar. Se requieren de medidas urgentes para detener la multiplicación de infectados.
