
Claramente lo que preocupa a los trabajadores no es a la parte de “techos”, está bien que las paritarias no tengan tope, sobre todo con el constante aumento en los precios de los alimentos y los tarifazos que vienen en los próximos meses. El problema viene de la mano con la falta de “pisos”. Es una declaración poco feliz, teniendo en cuenta que el acuerdo se hará entre el gobierno de Alberto, acostumbrado a cederle a las demandas de los empresarios (Vicentín, mandar a trabajar en plena pandemia a los esenciales, etc.), las cámaras empresariales que hacen ceder al gobierno y la CGT para quienes la defensa de los trabajadores no viene siendo su fuerte hace algunos años.
Cecilia Todesca, la vice jefa de gabinete, planteó que “el presupuesto es una importante guía que tenemos que defender”. Un presupuesto enmarcado en los lineamientos del FMI que contiene partidas presupuestarias para aumentos de los trabajadores estatales de…7%, una verdadera miseria, pero con las declaraciones de “ni techo ni piso” el gobierno les promete a los empresarios que si logran acordar con la CGT puede ser incluso menos.
Los trabajadores no tenemos nada bueno que esperar del encuentro entre La CGT, las cámaras empresariales y los funcionarios de un gobierno que se esfuerza cada día un poco más en aplicar el presupuesto del FMI. Las paritarias si deben tener piso, el de la canasta básica familiar indexado a la inflación y que por una vez los que pierdan, los que no tengan “piso” sean los empresarios.






