Desde octubre de 2020 se están desarrollando los debates públicos por el juicio contra los genocidas de la última dictadura militar que actuaron en tres centros clandestinos de detención: el Pozo de Banfield, el Pozo de Quilmes, y el “Infierno” de Avellaneda. La causa se tramita en el Tribunal Oral en lo Criminal N° 1 y juzgará a 18 genocidas que cometieron crímenes contra 442 compañeras y compañeros que fueron secuestrados, desaparecidos y/o asesinados, torturados en el marco del plan sistemático genocida.
En este marco el martes pasado 22 de noviembre declaró el compañero Eduardo Castellanos, militante revolucionario en la década del 70´, detenido en enero de 1976 por la Policía Bonaerense y secuestrado por la dictadura durante 2 años. Hoy continúa su militancia socialista en el Nuevo MAS y acompañando la lucha en la defensa de los Derechos Humanos junto a familiares víctimas del gatillo fácil y la represión policial. Compartimos a continuación su testimonio de los hechos.
