
Según información que brindan los abogados de la familia, Facundo fue llevado a la dependencia de Mayor Buratovich luego de ser detenido por circular sin permiso y quebrar la cuarentena, alrededor de las diez de la mañana en el retén de la ruta 3 a pocos kilómetros de Pedro Luro, ese 30 de abril en que Facundo iba rumbo a Bahía Blanca. Entre otros datos salientes, los abogados afirman que los policías que lo subieron al patrullero ya estarían identificados, así como los que participaron en el encubrimiento posteriormente.
Del allanamiento de hoy participaron miembros de la Policía Federal de Bahía Blanca y, a pedido de la familia como perito de parte el adiestrador Marcos Herrero, que junto a sus perros ha sido parte de numerosos casos y búsquedas de personas en el último tiempo.
Dado el operativo de encubrimiento e impunidad montado desde el comienzo de la investigación, la familia y los abogados emprendieron formalmente ayer la recusación del fiscal que intervino desde el comienzo en la causa e investigo la desaparición como “averiguación de paradero”, se trata de Santiago Ulpiano Martínez. Tomo como cierta la “hipótesis” de los policías de la bonaerense que hablaban de que tras labrársele el acta por la mañana del 30, Facundo emprendió rumbo hacia Bahía Blanca.
Los policías afirman que Facundo está vivo y en esa ciudad, dieron versiones hasta de haberlo acercado personalmente con su vehículo a localidad cercana de Origone, como es el caso de la agente Flores. También plantaron testigos para instalar esa versión, según denuncian los abogados, incluso formaron parte de esta maniobra miembros de la prensa local filtrando difundiendo la información de los falsos testimonios.
Días atrás se conocieron las amenazas a la ex novia de Facundo, a quien iba a visitar el día en que lo desaparecieron, para que se inculpe por los hechos. Amenazas que se suman a las que recibió el abogado de la familia Luciano Peretto, por parte del subcomisario de la bonaerense Pablo Reguillon, en un operativo de búsqueda al que acudieron luego de haber sido apartados tardíamente de la causa.
La connivencia entre el fiscal, las irregularidades y dilaciones en la búsqueda son el mejor ejemplo de que la investigación estuvo desde un comienzo amañada buscando el encubrimiento de los agentes de la policía bonaerense. ¿Qué esperan el gobierno provincial y nacional para actuar ante la gravedad del caso?
En una presentación reciente en el Senado, la ministra de Seguridad de la nación, Sabina Frederic, dijo que ante los reiterados casos de violencia institucional se ocupaban de mandar protocolos y seguir los pasos de las medidas que toman los gobiernos y autoridades locales ante los hechos…no parece que le quite el sueño la escalada de violencia de las fuerzas represivas del estado contra lxs pibes de los barrios humildes y de trabajadores del país.
Estos elementos vuelven insostenible el descarado apoyo que el ministro de Seguridad provincial, Sergio Berni, mantiene para con los miembros de la bonaerense. Nada le hacía sospechar que hubieran tomado parte o tuvieran responsabilidad en la desaparición de Facundo, declaraba el ministro. Incluso el gobernador Kicillof sostuvo su defensa poco encubierta en el marco de la gravísima situación de violencia institucional y desaparición forzada perpetrada por la Policía Bonaerense.