Se trata de una organización emblemática de la zona por su involucramiento en los casos de violencia policial y estatal junto a las víctimas. La Matanza es una zona particularmente golpeada por los casos de gatillo fácil y la impunidad de la violencia policial.

Algunos de los casos más conocidos en los que APDH La Matanza fue parte de la denuncia de las fuerzas represivas son los casos de Luciano Arruga y Gabriel Blanco. A raíz de acompañar a la familia de Blanco es que este año denunciaron haber recibido amenazas y hostigamientos anónimos de gente sin duda vinculada a la policía.

El incendio de su casilla, el lugar en el que reciben las denuncias de las víctimas de la violencia institucional, no puede no ser un mensaje mafioso salido del riñón del estado.

Reproducimos su comunicado:

«NOS INCENDIARON EL ESPACIO

Hace un rato una compañera recibió el llamado de una vecina: «Se está incendiado la Asamblea». Quienes pudimos nos acercamos y la imagen fue terrible.

No quedó nada de las casillas. Estamos haciendo la denuncia correspondiente, pero estamos en estado de alerta.

Perdimos todo: las mesas y sillas de lxs pequeñxs palomerxs que vienen los miércoles. Los libros. Cuadros que para nosostrxs tienen mucho valor simbólico y afectivo. También las herramientas de construcción.
El baño ya no existe.

No caemos todavía.

En varias ocasiones hicimos público cada hecho que sufrimos en nuestro espacio y éste es uno de los más graves.

De repente, la tristeza nos invade. Nos quedamos sin palabras. Años y años de militancia para que los ataques lleguen a este punto.

Necesitamos urgente el acompañamiento.

Estaremos ampliando la información a medida que vayamos resolviendo esto.

Mientras, difundan.
Gracias

Compañerxs de APDH-LA MATANZA»