El abrazo contó con la participación de trabajadores de la Televisión Pública, de Radio Nacional de RTA, de APE, y de los históricos trabajadores de Télam. También estuvieron otros sindicatos, como el Sindicato Argentino de Televisión, jubilados de los distintos gremios y un activismo que generó un clima de lucha necesario en este contexto de congelamiento y censura.
El gobierno nacional sigue con la arremetida contra los medios públicos. El caso más paradigmático y dramático es el silenciamiento de la Agencia Nacional de Noticias Télam, que significó el cierre de corresponsalías en todo el país, perder noticias del interior, que hoy apenas llegan a los centros informativos. Fue la delegada de Télam Andrea Delfino la quien graficó esta dolorosa situación. Télam, la agencia que, antes de su silencio, era la segunda en lengua española, detrás de la poderosa estatal española EFE, dejó de informar, de mostrar fotografías, videos del acontecer diario. Y, además dejaron en vilo el importante archivo periodístico, de textos y fotográfico (entre sus joyas está el saqueado, pero vigente, repositorio del conflicto de Malvinas) varias veces utilizado por los grandes medios, visto en documentales y ficción. Télam cumplió el 14 de abril 80 años desde su creación.
El desguace de los medios públicos favorece a los grandes monopolios informativos. Sin Télam tienen campo abierto para informar tan sesgadamente que a veces asombra. También favorece a que las negociaciones paritarias sean a la baja. Es sabido que Télam siempre fue vanguardia en la lucha del Sindicato de prensa. Tanto que varios de sus delegados fueron quienes hace 10 años rompieron con la burocracia corrupta de la UTPBA para organizar el SIPREBA.
Por ello, celebramos que, a pesar de tiempos tan duros para la libertad de expresión y la lucha sindical, se convoquen a medidas como el abrazo a la TV Pública, que fue, también, un abrazo a los medios públicos.
Son tiempos duros para los que pelean y defienden el pluralismo informativo, la libertad de expresión y, desde ya, lo importantes medios públicos. También las paritarias prensa, que irrisoriamente son de los más bajos de todos, con salarios que no llegan, ni siquiera se acercan, a la canasta mínima. Otra pelea que debe dar el Sindicato ante las conveniencias que tiene el poder de desinformar.
Desde esta columna apoyamos firmemente la pela de los medios públicos por descongelamiento salarial y contra sueldos de pobreza de todos los trabajadores de prensa.




