Desde principios de año les estudiantes del Joaquín V. González venimos dando una lucha a brazo partido contra el intento del macrismo de cerrar nuestras casas de estudio creando la uniCaba. El surgimiento de un nuevo activismo que le puso el cuerpo a todos los espacios y actividades, en asambleas, cortes de calle, clases públicas, marchas, escraches y la toma, fue la clave para desarrollar esta lucha desde el principio. Con la medida de la toma les estudiantes del Joaquín se sumaron con todo a la rebelión educativa que recorrió el país.

Se logró poner un freno al macrismo, quien tuvo que salir con un nuevo proyecto descartando el primero. Ahora plantean una coexistencia mentirosa entre uniCaba y terciarios. El rechazo sigue siendo masivo. Los terciarios no queremos la uniCaba.

Todo esto se logró a pesar de la dirección de nuestro centro de estudiantes (La Caravana – Patria Grande) quienes en todo momento se jugaron a vaciar las asambleas, a no garantizar ni un corte de calle para realizar clases públicas (todos los cortes que se hicieron los garantizaron estudiantes independientes) y a organizar, junto al rectorado, el levantamiento de la toma. Quedó clarísimo para quien juega La Caravana: Para el rectorado y para los sectores que plantean que «hay 2019».

A dos semanas de las elecciones a centro y consejo y en el contexto de ajuste brutal que estamos viviendo, quedó muy claro que necesitamos un centro de estudiantes que se plante contra el gobierno. Que organice a les estudiantes y apoye las luchas obreras. Que forje la unidad obrero estudiantil. Un centro de estudiantes que lleve hasta el final la pelea contra la uniCaba hasta derrotarla.

En este marco es que el activismo y el conjunto de las corrientes de izquierda decidimos poner en pie un gran frente de lucha, democrático y combativo para barrer a la burocracia estudiantil y llevar la rebelión educativa al centro y al consejo.