
El predio se encuentra abandonado hace años y fue recientemente ocupado por el grupo de vecinos que reside allí en estos momentos. Como en tantas otras tomas de tierras a lo largo del país, los terrenos ociosos están siendo recuperados por cientos de personas que buscan un lugar digno para vivir. Así, levantaron casas y comedores para poder sobrevivir en medio de la inmensa crisis social que arrojó a más del 40% de la población a la pobreza.
El ingreso de la policía es un nuevo intento de amedrentamiento brutal, que por ilegal e irregular quiere demostrar que están dispuestos a hacer cualquier cosa para que no exista el derecho a pelear por tierra y vivienda. Se trata menos del derecho a la «propiedad» de algunas personas concretas y más del derecho a privar de toda propiedad a los pobres: nuevamente, el predio se encontraba abandonado hace años.
El Nuevo MAS de la Zona Oeste emitió un comunicado de repudio al accionar policial: «En la mañana de hoy la policía ingreso nuevamente a la toma de La Nueva Unión en Rafael Castillo, prendiendo fuego todo a su paso, pese a los intentos de los vecinos de proteger sus viviendas y a los tres comedores que funcionan en lugar. Los efectivos policiales incendiaron hasta a la mercadería de los comedores. También se llevaron detenido a un vecino que trató de resistir el atropello de la policía.
Exigimos la pronta liberación de del vecino Brian Saucedo!
¡Nos solidarizamos con los vecinos de la toma de La Nueva Unión y exigimos que les reconozcan el derecho a tener tierra para vivir!
Repudiamos al accionar policial de la Comisaría de Rafael castillo y al subcomisario Benítez como así también al intendente Fernando Espinoza por lo ocurrido».