
El 2023 es un año electoral en el que entran en juego todos los cargos electivos, a nivel nacional y provincial. Si bien todavía no comenzó el cronograma electoral, sí se abrió el juego de alianzas y posicionamientos previos de cara a las PASO y las generales.
En el caso de la provincia de Santa Fe la gran novedad es que se viene perfilando un escenario con dos grandes coaliciones, lo que representa un cambio en relación a los últimos años en donde estaba como alternativa político electoral el Frente Progresista (el PS, la UCR provincial y otras fuerzas) frente al peronismo y el macrismo.
En estas elecciones se van a presentar por un lado el peronismo que gobierna la provincia y por el otro lado la oposición (que dirige las dos ciudades más importantes como son Santa Fe y Rosario) que se unifica en lo que se denomina el «frente de frentes». Es decir que va a ser una elección a priori marcada por una polarización fuerte entre dos grandes coaliciones que gobiernan la provincia y las dos ciudades principales y que se unifican con objetivos a la vez defensivos y ofensivos: por un lado mantener los gobiernos que detentan pero por el otro conquistar los territorios donde son oposición. Y es bajo esa lógica que se vienen discutiendo los dos grandes frentes.

El peronismo aparece debilitado a nivel provincial, con una gestión de gobierno de Omar Perotti con profundos rasgos conservadores, aliado al estafador grupo Vicentín, a las patronales campestres y a las multinacionales. Durante los tres años de gestión perottista, su mayor objetivo fue «hacer caja», subejecutando partidas presupuestarias, poniendo los ingresos en plazos fijos y atacando las luchas de los trabajadores. Ejemplo de esto es el deterioro a pasos agigantados de la salud y educación públicas, los numerosos paros de docentes y estatales por aumentos salariales que no pierdan frente a la inflación y un ministerio de trabajo provincial que actúa sistemáticamente a favor de las patronales como en la reciente lucha de los estibadores contra la patronal TPR (dependiente del grupo Vicentín).
Pero a pesar de esta clara ubicación conservadora del peronismo provincial, amplios sectores como el kirchnerismo, Ciudad Futura y otros plantean una alianza con el perottismo para estas elecciones. La justificación pasa por unir fuerzas contra la derecha conservadora representada por Juntos para el Cambio y otras fuerzas. Sería algo así como unirse con la derecha para enfrentar a la derecha…
A su vez, por el lado de la oposición provincial (pero oficialismo municipal en las dos grandes ciudades) nos encontramos con la novedad de la conformación del llamado frente de frentes. Es decir, una coalición electoral que une al PRO, a la UCR, a la Coalición Cívica, al GEN, otros partidos y la integración del Partido Socialista.
No está de más recordar que el PS viene de gobernar 20 años la ciudad de Rosario y 12 años la provincia de Santa Fe, que esta provincia fue su gran vidriera y que históricamente se caracterizó por tener una «tercera posición» diferenciada del peronismo y del macrismo. Si bien electoralmente esa fue su ubicación, en los hechos concretos el socialismo sostuvo posiciones hacia la derecha, como fue apoyar a las patronales del campo en la disputa del 2008 por la 125 , su oposición a las retenciones a las exportaciones agrarias o el apoyo al derechista Capriles en Venezuela. En cuanto a su gestión de gobierno provincial y municipal, se caracterizó por una mayor inversión en salud, cultura y educación públicas, por políticas de desarrollo social, por el apoyo e impulso a políticas como el derecho al aborto y el matrimonio igualitario, entre otras, que le dieron una impronta propia (claro está que sin cuestionar un ápice ni tocar los intereses de las grandes patronales de la provincia).
Es este partido histórico en la provincia que acaba de definir y firmar un acuerdo electoral con la derecha conservadora, con sectores profundamente antiobreros y antiderechos, nostálgicos de la dictadura e inclusive con partidos bolsonaristas y evangelicos reaccionarios. En el frente de frentes, además del PRO macrista y de Patricia Bullrich, están la UCR (con dirigentes como Dionisio Scarpín, defensor acérrimo de Vicentín), el PDP (partido que gobernó Rosario durante la dictadura militar genocida entre 1981 y 1983), la liberal UCEDÉ, el evangélico y antiderechos UNO (partido por el que entró como legisladora provincial Amalia Granata) y el bolsonarista Encuentro Republicano Federal. Es decir, para no aburrir más con este racconto, el Partido Socialista se alía con la derecha más conservadora, con los que pregonan las reformas laboral y previsional y quieren atacar todos los derechos de los trabajadores. Se une con el liberalismo más puro, con defensores de la dictadura militar, con antiderechos de las mujeres y LGBTTI y con defensores de Bolsonaro. La justificación del PS para formar este frente conservador es que habría que unificar fuerzas con todos para derrotar al peronismo. Hablan de un supuesto programa de gobierno que sería la característica de esta coalición, programa que todavía no existe pese a que ya firmaron su integración al mismo. Los limites de esta justificación de unidad sobre el programa se avizoran en los debates internos que están teniendo, por ejemplo con el tema de la educación. Como dentro de la coalición hay fuerzas que defienden la Educación Sexual Integral (ESI) y hay otras que se oponen rotundamente, la solución pasa por firmar una declaración en general pero sin abordar las definiciones concretas. Es decir que firman un programa que sería una generalidad que permitiría integrar a todos sin decir cuáles serían las políticas concretas. Eso mismo en todos los temas, con lo cual se puede ver que la justificación para la alianza con sectores conservadores no tiene demasiado sustento.
Este giro a ritmo acelerado del socialismo hacia posiciones cada vez mas conservadoras está generando un cimbronazo interno muy fuerte dentro del partido, con sectores de base que cuestionan este frente. Fueron numerosos los posteos en redes de dirigentes y militantes del PS criticando a la dirección del partido, planteando la desafiliación y no sumarse al frente. Ello incluye a todo un sector interno, denominado Bases, dirigido por la ex ministra de educación provincial Claudia Balagué, que está discutiendo internamente romper con el partido y sumarse al frente de centroizquierda encabezado por Carlos del Frade, Ruben Giustinniani y el radical disidente Fabián Palo Oliver. O a la fuerza interna dirigida por el intendente de Santa Fe, Emilio Jatón, llamada Fuerza de Territorio, cuyo referente en Rosario es el actual secretario de Salud, Leonardo Caruana, que está debatiendo no sumarse al frente para no terminar como furgón de cola de Juntos por el Cambio.
Esta crisis a pasos agigantados de este partido centenario se puede confirmar cuando se ve que su presidenta Mónica Feinn (ex intendenta de Rosario) al mismo tiempo que impulsa la alianza conservadora con el PRO, la UCR y otros grupos, se reune en Córdoba con el gobernador Juan Schiaretti (gran empleado de las multinacionales automotrices y las patronales agrarias) en apoyo a su armado electoral «antigrieta», declarando que con Schiaretti: «Nos comprometimos a trabajar juntos en una alternativa para construir un frente».
Ante esta situación de un giro acelerado del Partido Socialista hacia la derecha, es que llamamos a sus bases honestas y a su juventud a romper con esas políticas y sumarse a la izquierda. Porque no se puede enfrentar las políticas de ajuste, entrega y acuerdo con el FMI del peronismo si se alía con aquellos sectores que proponen mas ajuste, reformas antiobreras y derogar derechos ya conquistados. No se puede luchar por el medio ambiente y los humedales si al mismo tiempo se une con los sectores que representan a los que queman y depredan las islas en función de sus negocios. Llamamos a quienes se oponen a estos acuerdos con la derecha a sumarse a una perspectiva anticapitalista, la unica alternativa viable frente a la derecha de los Perotti, los Massa, los Macri y los Milei.







Infames traidores a la patria esos socialistas que se sumaron a las listas de la muerte!!!