
La ocupación de camas de terapia intensiva esta superando en estos momentos el 90%, tanto las que corresponden para pacientes con Covid-19 como por otras patologías.
La provincia lleva acumulado un total de 4000 contagios desde el comienzo de la pandemia, y en estas últimas semanas, si bien el foco principal se mantiene en el conglomerado de Neuquén Capital- Centenario-Plottier y la comarca petrolera de Cutral-Co, hay casos en muchas localidades de la provincia.
A su vez, el promedio diario de contagios está cercano a los 150, más de 2000 casos activos, y casi 70 fallecidos en toda la provincia.
El pedido que realizan los trabajadores de la salud desde el principal hospital de Neuquén Castro Rendón, pone de manifiesto la realidad que se vive en la provincia.
Están denunciando el creciente número de contagios de coronavirus en personal de salud (en los últimos 14 días se registraron 96 contagios) y la falta de medidas de cuidados en la población.
También solicitaron al Estado provincial que es necesario de manera urgente incorporar recursos humanos, porque como en el resto del país, es más que notorio el cansancio de la mayoría del personal tras meses al frente de la batalla contra el virus.
A su vez, denuncian que el gobierno incumple con los acuerdos, porque no pagan el aumento salarial firmado, ni la ropa de trabajo.
Ante esta situación, ha salido un llamado desde el Poder Judicial a una «convocatoria voluntaria», para encontrar médicos, enfermeros, bioquímicos y psicólogos que se dispongan a contener la situación epidemiológica.
La provincia recibirá en los próximos días una ayuda de nación, cuatro médicos terapistas y 20 respiradores, pero el personal de salud ha salido a reclamar que esto no soluciona para nada todo lo que realmente se necesita.
Desde el Colegio Médico que reúne a más de 800 profesionales, vienen haciendo público que los equipos de salud están «a punto de claudicar», viendo como se agrava la situación del sistema sanitario en la provincia.
Aseguran que tanto enfermeros, kinesiólogos, médicos, bioquímicos y todos los integrantes de los equipos de salud «se sienten cansados, a veces superados, impotentes, golpeados por la pérdida de colegas y a punto de claudicar…estamos viviendo momentos críticos», afirmaron en un comunicado.
El Sindicato de Enfermeros de Neuquén, se ha sumado también por estas horas para poner en «alerta» a la población por la situación epidemiológica que no cesa, y por lo tanto el sistema de salud podría no dar a basto en el transcurso de este mes, como ya viene sucediendo en varias localidades de la vecina provincia de Río Negro.
Aunque apuntan a la «responsabilidad social», queda de manifiesto la falta de respuesta por parte del Estado que no destina un presupuesto de emergencia real para salud, en medio de la crisis sanitaria.
La respuesta del gobierno de Omar Gutiérrez viene siendo la de aplicar medidas restrictivas y punitivas y el plan «Detectar» que está mostrando su fracaso; salidas por número de dni, responsabilidad del «cuidado individual», y los domingos prohibición de circulación vehicular a excepción del personal esencial.
La culpa de que los contagios sigan en aumento se encargan de hacerla recaer sobre la población. Al igual que el gobierno nacional de Alberto Fernández, se resguardan conque «habrían hecho todo lo posible», entonces ahora todo depende de la «responsabilidad individual».
Hace meses que flexibilizaron la cuarentena, que hoy ya no existe. En un 95% se encuentran habilitadas las actividades por presión de las patronales, siendo que crece la circulación comunitaria del virus.
En los lugares de trabajo donde se producen gran cantidad de los contagios, no se respetan protocolos, se aisla en muchos casos sólo al positivo confirmado, y si no lo exige el personal para cerrar y desinfectar, todo sigue funcionando con «normalidad».
La situacion económica y social se sigue profundizando, las familias que viven del día a día se ven obligadas a salir para ganarse unos pesos y poder sobrevivir, exponiendo su salud y la de su entorno familiar.
Son los trabajadores/as de la salud quienes en medio de la pandemia, estando en la primera línea y que exponen su vida para cuidar a la población, los que asumen la responsabilidad de hacer público la situación de crisis sanitaria.
Una salida inmediata ante la posibilidad cierta de que el sistema de salud colapse, es que el mismo pase en su totalidad a manos del estado, al mismo tiempo que en cada hospital y centros de salud se organicen y pongan en pie comités de seguridad e higiene bajo control de sus trabajadores/as.
De manera urgente deben aplicarse fuertes impuestos a las grandes fortunas, a las petroleras, para destinar ese dinero a todas las demandas en salud, y no al pago de la deuda externa.
De este modo, se debería volver a fase 1 con plenos derechos y condiciones sanitarias.
En «la mejor provincia del país» (slogan del gobierno del MPN), el colapso sanitario está a la vuelta de la esquina si no se toman medidas sanitarias para cuidar realmente a la población y al personal de salud.






