El round de las elecciones nacionales lo ganó Milei y lo perdió el peronismo. El gobierno ganó hasta en la provincia de Buenos Aires, y ahora va a venir a redoblar la ofensiva anti obrera: prepara una reforma laboral que es tremenda, paritarias por fábrica, aumento solo por productividad, jornadas normales de 12 horas, contratos a prueba por 12 y hasta 18 meses, es decir legalizar el trabajo en negro. Eliminar las indemnizaciones como las conocemos hoy y poner un sistema donde vos mismo te pagás la indemnización, etc.

También está la reforma previsional, donde buscará aumentar la edad jubilatoria a los 70 años, sacar los regímenes especiales de jubilación anticipada, entre otros derechos que buscará arrebatar.

El peronismo fracasó rotundamente, desde que asumió la ultraderecha no quiso “pelearla en las calles” y apostó a frenarlo a Milei en el parlamento, respetar la gobernabilidad y la institucionalidad ante un gobierno que de “respetar la institucionalidad, te la debo”, como hizo con las leyes sobre discapacidad, Garrahan y universidades.

Después del gran triunfo de septiembre pensó que ganaba con piloto automático, sin dar pelea, sin hacer propuestas, sin responder a la campaña del miedo que largaron Trump y Milei. El peronismo, ni qué hablar de la CGT, demostraron que no son la herramienta para frenar a Milei y defender los derechos de los trabajadores. Ahora, después de que no hicieron nada, le echan la culpa a la gente y siembran la desmoralización y el derrotismo para tapar su responsabilidad.

La conclusión es clara: a la derecha la frenamos los trabajadores dando pelea con los métodos de la clase obrera o no la frenamos.

La paritaria y la Negra en un laberinto

En todo este escenario adverso, en el Neumático llevamos 11 meses de atraso salarial. Ya se juntó el final de la paritaria anterior, la actual y, si todo sigue así, se va a terminar juntando con la siguiente. Con este ataque a nuestro bolsillo las patronales están buscando que la gente se canse, pida el arreglo y se vaya. Los compañeros se van porque están cansados, desmoralizados, porque no ven perspectivas de que la cosa cambie y que la Negra cambie, ellos son parte del problema y no de la solución.

La Lista Negra es parte de la desmoralización porque dejó pasar la pérdida de 2000 puestos de trabajo el último año y medio sin que haya una lucha en serio, un cambio de sistema que solo benefició a la patronal, el revoleo de gente de sector a sector, un departamento médico que hace con nosotros lo que quiere, y la lista sigue.

Compañeros, no se vayan, la calle está muy dura y en el gremio las cosas pueden cambiar. Las últimas elecciones del gremio y de FATE en particular demostraron que hay reservas para luchar y cambiar las cosas. El Frente Naranja-Marrón perdió por solo 23 votos en medio de maniobras fraudulentas, todos sabemos que hicieron votar a compañeros que no correspondían.

La Negra no tiene legitimidad, salió más débil de las últimas elecciones, y encima se siguen dividiendo y peleando entre ellos.

Mientras tanto hace más de lo mismo: paros aislados sin continuidad, acciones en la calle solo “para la foto”, total ausencia de la base, ninguna iniciativa que busque la participación de los compañeros de base, y la lista sigue… El último zafarrancho fue el “acto” que se hizo en la puerta de FATE durante el último paro: una acción minúscula, donde se le negó la palabra a otros compañeros con patoteadas incluidas. Así no.

En este escenario, la estrategia que vienen llevando adelante Crespo y la Lista Negra ya fracasó; fue y es funcional al desgaste, no sirve para recomponer fuerzas y darle pelea a la patronal. Dicen que no van a firmar el salario “a la baja”, mientras todos sabemos que la Asesoría Técnica y Legal de la Secretaría de Trabajo “nos va a cocinar”.

Necesitamos Asamblea General y votar una dirección para esta lucha

Como Lista Marrón lo venimos diciendo hace rato: la política y el método de conducción de la Lista Negra solo conducen a más burocratización. Desde el Frente Naranja-Marrón lo dijimos en las elecciones al SUTNA: necesitamos otra forma de organizar el gremio. Que hayan metido una mano negra en los padrones distorsionó el resultado real, y ahora hay una gran apatía sobre las convocatorias a las pocas acciones que hace el gremio.

El camino para enfrentar a la patronal no puede ser que todo se resuelva entre dos o tres, entre cuatro paredes y de espaldas a los trabajadores. Es necesario hacer asamblea ya, que el activismo que quiera salir a pelear pueda expresarse, organizarse. La conducción dejó de hacer asambleas en el pasillo ¿por miedo a las críticas? Con pasaditas express por los sectores y dejando “notas de reclamos” en la oficina de RRHH no hacemos nada.

Necesitamos una Asamblea General del gremio YA. Que se democratice el sindicato. Que definamos el rumbo a seguir entre todos. Necesitamos un Comité de Lucha por la paritaria votado en Asamblea que integre a todos los colores que quieran luchar. El programa más votado adentro de FATE fue el del Frente Naranja-Marrón, y se demuestra día a día que lo que necesitamos es más participación, menos burocracia y una nueva dirección.

A la patronal la enfrentamos entre todos, y la paritaria la vamos a conseguir si damos una lucha colectiva: el método “Crespo conducción” hace agua, para ganar necesitamos otro SUTNA y el primer paso es pelar por un Comité de Lucha realmente representativo de la base.