Llamamos a no concurrir al acto de la CGT porque no sólo no sirve para luchar contra Milei, sino que es en apoyo a la estrategia política de la burocracia sindical y del peronismo de seguir dando gobernabilidad a Milei.

Ellos no quieren derrotar el plan económico, político, cultural; es decir global del gobierno, sino votar en las próximas elecciones al peronismo, ellos tienen tiempo para esperar a octubre y al 2027. Nosotros NO.

La CGT subordina nuevamente al movimiento obrero a un partido que propone la “conciliación de clases” defendiendo un inexistente “capitalismo con rostro humano” y que siempre aparece en momentos de crisis para “sacarle las papas del fuego” a los capitalistas.

El 30 de abril la CGT convocó a una marcha al Monumento al Trabajo “para reivindicar no sólo el Día del Trabajador, sino que además la concentración servirá para repudiar el acuerdo del gobierno con el FMI y las reformas laborales y previsionales que le ordenó al presidente Milei” puras frases de compromiso, no sólo se necesita repudiar sino esencialmente derrotarlas.

La convocatoria es apoyada por las CTAs y las organizaciones piqueteras enroladas en la UTEP y se descuenta también la participación de sectores del peronismo. Finalizado el acto se anuncia que dentro de la CGT la dirigencia tiene planificada una reunión con gobernadores del PJ, Axel Kicillof informó que asistirá al llamado de la CGT.

Si Milei ha llegado hasta acá es producto de la estrategia política de la burocracia sindical de la CGT y el peronismo que le ha dado la gobernabilidad necesaria para aplicar sus planes; por un lado, “administrando” la bronca y el conflicto social “dosificando” los paros y, por el otro, dándole los votos en el  Congreso para no desestabilizar al gobierno, con el objetivo de llevar todo al terreno electoral.

Después de casi un año de “ausencia” y cuando el gobierno comenzó a “hacer agua”, en particular por el desborde que se produjo en la marcha de los jubilados del 12 de marzo, por la bronca acumulada que enfrentó a la feroz represión de la ministra Bullrich, la CGT en lugar de profundizar la lucha y convocar al paro y movilización en repudio a la represión para el miércoles 19/4 se limitó a sacar un comunicado, evitando ir al Congreso donde ese día se votó la aprobación del DNU que habilitó al gobierno a un nuevo acuerdo entreguista con el FMI.

Esta es la estrategia “conciliadora” que la CGT viene imponiendo desde que asumió Milei; un paro por acá, una marcha por allá, pero nunca un plan de lucha en serio para derrotar al gobierno; pasada la oportunidad y con los ánimos más fríos convocó a una concentración para lavarse la cara recién para el miércoles 9/4 en apoyo a los jubilados y un paro dominguero para el 10/4. Para entender a fondo cómo actúa la CGT  citamos las declaraciones del dirigente ferroviario Maturano que reconoció que el paro era para descomprimir la bronca popular para ayudar a que Milei finalice su mandato, cuando sin ruborizarse declaró: “Hay una presión social grande» y que si frente a ello la CGT «cierra todas las canillas, eso va a explotar por algún lado». «No puede explotar por ningún lado. Este gobierno tiene que llegar a los 4 años, con todas las cagadas que se va a seguir mandando, a fin de año, elegiremos otro o el mismo, pero tiene que llegar y la democracia estar tranquila, en paz social y tratar de conservarla».

En esa misma línea se inscribe la convocatoria del 30/4 previa al 1° de Mayo, un acto super controlado por el “aparato sindical” donde el protagonismo será de los “cuerpos orgánicos” y no de las bases, un acto que no tiene la más mínima intención de servir para la lucha contra el gobierno; en definitiva, la burocracia monta el acto por un lado, en apoyo a su política conciliadora de darle gobernabilidad a Milei y, por el otro, para “transar” con los gobernadores el apoyo al peronismo para las próximas elecciones.

Frente a este escenario era una obligación de los sectores del sindicalismo combativo que se reivindican antiburocráticos y clasistas y los partidos de izquierda que hemos estado a la vanguardia de la lucha contra el gobierno de Milei, de convocar este 1° de Mayo a un acto de independencia política de nuestra clase, que levante una tribuna de lucha que sea una alternativa a lxs trabajadorxs, jubiladxs, a las mujeres, la juventud, los movimientos sociales y a todos los sectores que realmente quieren que se vaya Milei. Lamentablemente esto no fue posible por responsabilidad de los partidos del FITU que, enfrascados en sus peleas internas puramente electorales, dividieron la vanguardia, cometiendo un doble error. No sólo boicotearon un acto unificado sino que acordaron concurrir al acto de la CGT con sus corrientes sindicales, quedando en los hechos como furgón de cola de la burocracia y su política conciliadora.

Por todo esto, desde la Corriente Sindical Anticapitalista 18 de Diciembre llamamos a no concurrir al acto de la CGT porque no sólo no sirve para luchar contra Milei, sino que es una acto para apoyar la estrategia de la burocracia y del PJ de darle gobernabilidad a Milei, llevando todo al terreno electoral y apoyar los candidatos del peronismo en las elecciones que se vienen.

Por nuestra parte invitamos a todxs lxs compañerxs  que se quieran organizar para luchar contra Milei, a las actividades que están convocando nuestras agrupaciones sindicales para sumarse a nuestra Corriente Anticapitalista porque entendemos que la lucha de la clase obrera no sólo es en defensa de nuestros derechos sino que es una lucha contra el capitalismo y por un futuro sin opresión ni explotación.

¡Viva la lucha de la clase obrera internacional!