El gobierno de Córdoba encara la privatización de EPEC, una de las dos únicas compañías de servicios estatales que quedan en pie en el país. La licitación se lanzará en marzo de 2019, en vistas de efectuar el traspaso a manos privadas para julio de ese año.

Esta intención no es una novedad. Ya han privatizado algunos servicios como el cobro de facturas. También han terciarizado la reparación del sector automotor de la empresa y han cerrado cantidad de sucursales de atención al público. También han encarado el despido de muchos trabajadores, por la vía del retiro voluntario.

Pero la respuesta por abajo no se hizo esperar. Muchos trabajadores, incluso delegados, le exigen al sindicato que dirige Suárez que se plante contra la privatización, que se ponga al hombro la defensa de la empresa. Los más radicalizados son los trabajadores de los talleres de Villa Revol, que tienen la tradición de lucha de Agustín Tosco, que han hecho asambleas y medidas de fuerza, movilizando en el día de hoy, para defender a EPEC de los ataques privatistas y el desguace de la empresa, así como exigirle al sindicato que tome cartas en el asunto.