
El pasado 4/2 finalizaba el período de conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo provincial. A raíz de las infructuosas reuniones que fueron manteniendo la empresa y los trabajadores durante la conciliación, en las cuales la patronal se mostró siempre inflexible y sin hacer concesiones, las expectativas de lograr alguna vía de diálogo real en una nueva audiencia eran muy bajas. Y en efecto, en asamblea los compañeros decidieron ir a presentarse nuevamente en la seccional UOM de Quilmes para exigirle al «Barba» Gutiérrez que se ponga a la cabeza de un plan de lucha de una buena vez.
Ya en la seccional, y ante la negativa del burócrata entregador a dar la cara y aparecer, los obreros no dudaron en emprender medidas para hacerse oír, cortando las vías del Roca y la Av. Hipólito Irigoyen del centro quilmeño en forma simultánea.
Finalmente, el «Barba» aparece, no sin ser blanco de la bronca e indignación de sus supuestos «representados». Y no es para menos, ya que para la fecha aún no se había depositado la quincena. La situación está dura y la falta del pan en la mesa familiar no es algo con lo que se puede joder.
Como se sabía, la audiencia entre la empresa, el Ministerio y los compañeros no llegó a nada. Peor aún, la patronal continuó provocando depositando la quincena por goteo, un trabajador a la vez, y como si fuera poco, no soltando un peso a los despedidos. GRI es una multinacional que amasa miles de millones de dólares, y juega con el hambre de las familias. Una aberración total.
Finalmente, luego de una larga rosca se logró una prórroga de la conciliación que vencía el 9/2, con la cita de una nueva audiencia en La Plata, a cuál la patronal, Ministerio y sindicato dejaron plantados a los compañeros suspendiéndola misma minutos antes. Y los despedidos siguen sin cobrar. Otra provocación más, y van….
Queda claro entonces que la empresa se ha propuesto imponer la flexibilización en la fábrica intentando desmoralizar a los combativos obreros de GRI Calviño y su comisión interna independiente, jugando al desgaste de los compañeros. La patronal no quiere ceder en nada, y cualquier canto de sirena en este sentido, es solamente para ganar tiempo precioso que juega a su favor.
Ampliar los puntos de apoyo y golpear con más fuerza
En ese sentido, para poder dar pelea resulta fundamental salir a buscar puntos de apoyo y solidaridad, es decir abrir el conflicto para afuera, hacerlo público y juntar más fuerzas para golpear más fuerte. Que los laburantes impongan los tiempos, y no la patronal.
En el marco de una situación política donde el gobierno de Alberto Fernández se encamina a cerrar un acuerdo de ajuste y entrega con el FMI; donde la situación económica se deteriora día a día con la pérdida de poder adquisitivo; donde las patronales intentan sacar hasta la última gota de sudor de los trabajadores para aumentar sus ganancias; en fin, en una situación que hace muy difícil sobrellevar la vida, hay terreno para poner en pie una gran campaña de difusión contra estos ataques.

Una gran campaña de fondo de lucha es un gancho importante, que además de servir como aporte al sostén económico, despierta simpatía. Se pueden recorrer universidades y centros de estudios, como la Jauretche y la Unqui, donde suele expresarse sensibilidad por las luchas obreras. Asimismo, coordinar con otros sectores en lucha, como La Nirva y Garbarino para sumar fuerzas.
Ir a la puerta de otras metalúrgicas puede acarrear la empatía de otros laburantes, en la vía de instalar el conflicto en la base del sindicato, lo que es de gran importancia para seguir exigiéndole a los dirigentes burócratas que se pongan los pantalones, se llame al paro de toda la seccional y a un congreso de delegados.
Pero a la par de difundir y buscar el más amplio apoyo, hay que pasar a tomar medidas más contundentes que ayuden a instalar el conflicto a nivel masivo y llegue a miles de trabajadores que se vean reflejados en su acción. Para que se conozcan las arbitrariedades de la patronal y la complicidad del Ministerio de Trabajo que la deja hacer lo que quiere, y para que los trabajadores de GRI Calviño se conviertan en una referencia del enfrentamiento a los despidos y la flexibilización laboral.
Las acciones para sumar apoyo son vitales en la perspectiva de darle pelea a la nefasta patronal de GRI Calviño y la posibilidad de un triunfo. En ese sentido, desde la Corriente Sindical 18 de diciembre y el Nuevo MAS seguiremos acompañando incondicionalmente esta lucha, aportando y a disposición de lo que decidan.






