
Hace instantes nos enteramos que la empresa de reparto por aplicación Glovo se va de la Argentina. Para los trabajadores de reparto esta noticia es una verdadera bomba. Si bien en este momento todavía faltan algunas definiciones respecto de la retirada de la empresa, queremos ser claros con una cuestión: esta noticia expone con total claridad la precarización que día a día vivimos los repartidores. Para las empresas somos un número, dicen que somos “colaboradores”, y con eso encubren la relación laboral que tienen con quienes estamos en la bici o la moto.
Porque un colaborador no tiene derecho a reclamar si lo dejan sin trabajo, no tiene derecho a exigir indemnización por el retiro de la empresa, ni tampoco tiene derecho a reclamar si sufre un accidente mientras reparte. La astucia de estas empresas consiste en que han encontrado la forma de tener una auténtica legión de repartidores a su disposición, a los cuales apuran si se demoran y bloquean si se quejan.
La retirada de Glovo deja en evidencia por un lado, que miles de personas dependen del reparto por aplicación para subsistir, y por otro, que las empresas huyen de su responsabilidad con esos trabajadores con total impunidad, avisando del retiro de la empresa con un sencillo mail. Recordemos que son empresas que con la pandemia cerraron sus oficinas, pero siguieron facturando auténticas millonadas con el trabajo “esencial” de miles de repartidores, pero recontra precarizados y con tarifas que llevan años desactualizadas.
Desde JTP decimos bien claro que somos trabajadores, y como tales tenemos derechos. Es indispensable que se reconozca la relación laboral de las empresas con los repartidores, y todos los derechos que eso trae aparejado. Es por ello que el martes 22 de septiembre a las 15hs vamos a realizar un plenario virtual de repartidores de JTP caba porque consideramos que la tarea inmediata que tenemos es poner en pie un sindicato propio, antiburocrático, democrático y asambleario. Es un derecho y una necesidad. Nos permitiría construir una referencia para el conjunto de los repartidores. Podríamos reclamarle a quien sea necesario, no como individuos sino como colectivo de trabajadores, ya sea a la policía que nos acosa, a las empresas que nos penalizan o nos dejan en banda o los gobernantes que hacen leyes sin oir nuestra voz.
Sumate para discutir estos y todos nuestros problemas y encontrarle una salida de lucha y organización.





