La indignación popular y la movilización frente a los vetos de Milei a las universidades, a los jubilados, a los discapacitados o al Garrahan fueron claves para la profunda crisis política de su gobierno. El mes pasado, comunicaban oficialmente el veto a las leyes de Financiamiento Universitario, de Emergencia Pediátrica y de Reparto de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN). También, fingiendo demencia, anunciaron la judicialización de la Emergencia en Discapacidad después de que se supiera que le robaban a los discapacitados y Karina cobraba las coimas.
El cachetazo electoral sufrido por Milei y cia. no ha logrado torcer el nivel de provocación que viene caracterizando al gobierno desde su asunción.
La Ley de Financiamiento Universitario fue aprobada el pasado 22 de agosto y plantea que el presupuesto universitario sea del 1% del PBI. De esta manera, la educación universitaria volvería a los niveles relativos de gasto previos a la asunción de Milei en diciembre de 2023.
La Ley de Emergencia Pediátrica ordena refinanciar el sector de salud pediátrico mediante la transferencia de recursos para insumos, mantenimiento, medicamentos, vacunas, equipamientos y salarios. Esto implica la recomposición inmediata de los salarios de todos los trabajadores de la salud, incluyendo a los residentes. Se deroga la modificación al régimen de residencias del decreto 2109/2025, que pretende convertir a los residentes en ultra precarizados sin derechos laborales. Y, además, se establece que la recomposición salarial debe ser para recuperar todo lo que se perdió en salarios desde diciembre de 2023.
La provocación de no aplicar leyes aprobadas
El mes pasado, Milei venía de ser derrotado también con la caída del veto a la Emergencia en Discapacidad. Y también había decidido responder redoblando la provocación. El 23 de septiembre, en el mismo Boletín Oficial en el que promulgaba la Ley de Emergencia en Discapacidad y suspendía su aplicación, Milei anunciaba la baja de las retenciones a los ricos.
Según Milei, «no hay plata» para la aplicación de la Emergencia en Discapacidad, pero para lamerle las botas a los ricos bajando las retenciones a la carne y granos, “sí hay plata”.
Ya era un escándalo el robo del 3% de Karina con los sobreprecios en ANDIS. No dejaron pasar ni dos meses de que se supo que les meten las manos directamente en los bolsillos a los discapacitados que ya estaban provocando de nuevo.
Después de amenazar con judicializar la ley, Milei promulgó la Emergencia en Discapacidad tras la derrota de su veto, pero suspendieron inmediatamente su aplicación con la excusa de que la norma “Carece de fuentes de financiamiento”. En el mismo Boletín Oficial anunciaban la baja de las retenciones a las exportaciones, a la que le pusieron un rápido freno tras el pedido de los jefes de Milei en Estados Unidos.
Este es una clara provocación con varias caras. Por un lado, es un avance autoritario del Ejecutivo, que pretende hacer de cuenta que sus poderes son absolutos.
Con los impuestos que le pretendían rebajar a los patrones del campo, y del que se terminaron beneficiando solamente un puñado de empresas exportadoras, se podrían aplicar las leyes de Financiamiento universitario (según la Oficina del Presupuesto del Congreso, OPC, de un 0,23% del PBI) y la «Ley Garrahan» (0,02%). Respecto a Discapacidad, con esas retenciones podría costearse casi la totalidad de la ley. La OPC calculó que el costo de aplicación de la Emergencia en Discapacidad sería del 0,26%. El costo de bajarle las retenciones al agro iba a ser de alrededor del 0,25% del PBI. Para los ricos siempre hay plata, «no hay plata» para los pobres.
«¡Triunfo! ¡Con una paliza se tiró abajo los vetos a la Ley de Financiamiento Universitario y a la Ley de Emergencia Pediátrica!» declaró Manuela Castañeira, referente nacional del Nuevo MAS. «Si Milei no cumple con lo votado en el Congreso, hay que tomar las calles. No se puede mirar para otro lado, es hora de que la CGT salga de la siesta y convoque a paro general ya! ¡Tenemos que obligarlo también a respetar la emergencia en discapacidad. Si este gobierno de estafadores sigue negándose, hay que dejarse de dar vueltas y someter a Milei a juicio político para que se vaya!»
Triunfo! Con una paliza se tiró abajo los vetos a la Ley de Financiamiento Universitario y a la Ley de Emergencia Pediátrica!
Si Milei no cumple con lo votado en el Congreso, hay que tomar las calles. No se puede mirar para otro lado, es hora de que la CGT salga de la siesta y…
— Manuela Castañeira (@ManuelaC22) October 2, 2025