
Estamos en el día 20 de la cuarentena, con las presiones de los empresarios por flexibilizarla para garantizar sus ganancias, y la supuesta postura del gobierno de que entre salud y economia (nosotros aclaramos negocios de algunos) elige claramente la salud.
Pero resulta que mientras esto se comunica, nos encontramos con el reclamo por el traslado compulsivo de profesionales por el cierre del Centro de Atención Comunitaria de Villa El libertador, el día 2 de abril, con lo cual además de afectar a los mismos, se está privando de la atencion en salud mental a la población de un barrio tan grande. Justo en esta situación dónde el sufrimiento por las condiciones socioeconómicas, y ambientales, se ve agudizado por la cuarentena.
Sabemos que el no poder salir a ganar el sustento diario agrava los problemas de acceso a alimentos y elementos básicos de higiene, genera tensiones que el gobierno no soluciona
Al mismo tiempo se produce el reclamo del sector de enfermería del Hospital Príncipe de Asturias, de la misma zona, que denuncia en una carta pública la falta de insumos básicos para protección, y la falta de recursos humanos. Con la misma plantilla de personal, se han incrementado las áreas a atender, lo cual aumenta al doble la exposición que sufren.
No puede ser que por televisión salga el llamado del gobierno a inscribirse para voluntariado ¡en tareas ad honorem, para personal capacitado en tareas sanitarias!
Para hacer frente a la pandemia se debe comenzar por fortalecer a la primera línea, a todas y todos los trabajadores de salud. Esto requiere medidas concretas: duplicarles el salario para que puedan concentrarse en su labor sin otras urgencias, proveerles todos los insumos de protección, aparatologia y capacitación, incorporar mas personal, garantizar el descanso adecuado ¡Si ellos y ellas se enferman, le estamos abriendo la puerta al virus!
Hay que favorecer la organización de las y los trabajadores en cada centro de salud, para que puedan expresar y monitorear sus necesidades.
Priorizar la salud requiere algo más que palabras.
Hace falta presupuesto y recursos.
Plata hay ¡que sea para salud y no para el pago de la deuda!