Moritz Hess: el olvidado “Rabino Rojo” amigo de Marx V

“Espejo de la Sociedad”, una revista comunista: Hess y Engels entendían la función de la revista como una suerte de Katalysator en el ambiente de Wuppertal, predominentemente industrial, del movimiento real de los comunistas en general (incluyendo a corrientes ideológicas afines como la del wahre Sozialismus). Sabemos que el precoz Hess ya tenía experiencia en proyectos de esta índole: había participado en la publicación de la conocida Athenäum. Zeitschrift für das gebildete Deutschland.[1] Se trataba de un experimento político-editorial en Berlín, un órgano político partidario, nuevamente intentando confluir liberales radicales con protocomunistas filosóficos, lo llamaban ein Organ der politischen Bewegungspartei, que permitiera tanto la denuncia de arbitrariedades políticas como de propaganda de principios ideológicos, como la exhibición de las atrocidades sociales del sistema prusiano y la alianza férrea entre los Junkers, los terratenientes del Este, y el Bürgertum.[2] Además debemos subrayar, como ya hemos vista anteriormente, que Hess había sido cofundador, potencial director (desechado por los inversores por su radicalismo comunista) y colaborador del diario Rheinische Zeitung, en el cual llegará a ser Chief Redakteur el propio Marx, ese extraño laboratorio donde convivían hasta su clausura por el gobierno prusiano liberales de izquierda y jóvenes hegelianos.[3]

Ya en marzo de 1845, Engels vuelve sobre el tema de la revista como proyecto teórico-práctico y le comunica a Marx que “he tenido la oportunidad de hablar con el editor de la Gesellschaftsspiegel, B.[aedecker],[4] y, aunque no parece maldispuesto, sabemos que no tiene fondos para editar además una biblioteca más vasta. Aunque le presentemos la cosa de buena forma, creo que será mejor darle la impresión a Leske o cualquier otro editor que pueda hacerse cargo del tema. Yo no tengo tiempo de traducir personalmente los textos, porque tengo que terminar mis trabajos ingleses… En cuanto a la biblioteca de pensadores no sé si la sucesión histórica de los textos es la mejor opción. Seguramente será más interesante alternar autores franceses e ingleses, la concatenación cronológica será entonces contínuamente interrumpida. Sin contar que será mejor sacrificar el interés teórico por la eficacia práctica y comenzar con textos que ofrezcan a los alemanes más materiales y que sean al mismo tiempo cercanos a nuestros principios; en suma: las mejores cosas de Fourier, Owen, de los saintsimonianos, etc. Aunque Morelly puede ser editado entre los primeros. El desarrollo histórico se puede resumir brevemente en la introducción general, así como con una categorización de cada colección para que se orienten fácilmente. La introducción a cada autor la podemos hacer nosotros mismos, tú puedes tomar Francia y yo Inglaterra, lo podríamos ver cuando yo, tal como tengo la intención, pueda verte en dos semanas, y podremos al menos, en todo caso, discutir. Pero por sobre todo me parece esencial empezar con cosas que tengan repercusión práctica, que tengan un impacto efectivo sobre los alemanes y nos eviten el repetir cosas que ya se dijeron antes que nosotros. Si no somos capaces de darles una colección de las fuentes para la historia del Socialismo o, al menos, la historia en las fuentes y a través de las fuentes, me temo que no seremos capaces de hacer nada por un largo espacio de tiempo y que por sobre todo, la cosa se hará aburrida. Por eso soy de la opinión de darle prioridad a los textos cuyo contenido efectivo sea hoy en gran parte plenamente utilizable… Ya que esta idea se nos ocurrió a nosotros ‘dos’, hablo de la ‘Biblioteca’, hay que ponerla en acción. Hess estará encantado de participar en ella, lo mismo que yo, cuando tenga más tiempo, como  lo tiene ahora Hess, que fuera de la redacción de la Gesellschaftsspiegel, no está trabajando en  ningún proyecto… Es curioso que otro de mis planes, tal como el de la ‘Biblioteca’, haya coincidido con uno tuyo.” Finalmente Engels agrega como corolario de la carta la naturaleza del problema: “la Burguesía hace política y va a la Iglesia; de lo que el Proletariado hace, no sabemos nada y será duro saberlo.”[5]

El biógrafo clásico de Marx, Mehring, lanzó una hipótesis razonable sobre este proyecto político-literario pero eminentemente práctico: la estrecha colaboración con Hess (y con otros personajes del Socialismo alemán más avanzado de la época, como Karl Grün, Otto Lünning, Rudolf Matthai, Hermann Pütmann, Friedrich Schnake o Georg Weerth)[6] se debió a una imperiosa necesidad táctica-pedagógica. Engels y Marx debían combatir al llamado wahre Sozialismus desde dentro, ya que la circunstancia histórica había generado que junto al Comunismo filosófico (confusa amalgama de Hegel y Feuerbach con Proudhon), se hubiese forjado también del resto del Hegelianismus: “ambas corrientes desembocaron en el Socialismo arrancando de Hegel y Feuerbach… pero los ‘verdaderos socialistas’ contentábanse con traducir las fórmulas y los tópicos del Socialismo a su ‘corrompido alemán de hegelianos’”.[7] El trabajo de Engels y Marx (junto a Hess) en el proyecto Gesellschatsspiegel sería un “esfuerzo pedagógico” para orientar al deutschen Sozialismus hacia el Comunismo auténticamente científico y por ello crítico; se proponían la meta posible y plausible de llegar al Kommunismus como un necesario desarrollo lógico de la propia doctrina de los jóvenes hegelianos.[8] En este sentido, la Gesellschaftsspiegel será uno de los hitos en el desarrollo de la idea comunista en Marx. Sin embaro Mayer, el biógrafo clásico de Engels, reduce el proyecto de Hess a una dimensión meramente literaria: “proponíase (Engels), en unión con Hess, aprovechar el creciente interés del público por los problemas sociales, para crear una revista mensual, que, sin acusar una clara tendencia comunista, ya que ello podría echarla a pique desde el primer día, informase regularmente acerca de la situación de la clase obrera en Alemania, hasta entonces totalmente ignorada, tanto por la Ciencia como por el público.”[9] En Elberfeld, la ciudad natal de Engels, a principios de 1845, será Hess el que organizará lo que se reconoce como el primer mítin público comunista de toda Alemania, que se inauguraba todos los sábados por la noche con un variado programa artístico que incluía música, lectura de poesías y finalmente la lectura-debate del artículo de Hess “Las enfermedades de la Era industrial”.[10]

El programa de la revista preanuncia, con tres años de anticipación, muchas líneas político-ideológicas que desembocarán en el Manifiesto Comunista y su modelo de publicación en la frustrada publicación teórico-práctica, el Presseorgans de la Liga de los Comunistas, la poco conocida Kommunistische Zeitschrift.[11] Es además evidente la enorme influencia, en el pathos y en el método de Gesellschaftsspiegel, de la subestimada obra juvenil de Engels sobre las condiciones de la clase obrera inglesa, Die Lage der arbeitenden Klasse in England, [12] libro en el cual casi se repite la profesión de fe: “la situación de la Clase Obrera es el cuerpo real y punto de partida efectivo de todos los movimientos sociales del presente, porque constituye la saliente más encumbrada y desembozada de nuestra miseria social imperante. Tal situación ha engendrado directamente (sind direkt) al Comunismo obrero francés y alemán; indirectamente (sind indirekt) al Fourierismo y al Socialismo inglés, así como al Comunismo de la burguesía ilustrada alemana” y agrega que “el conocimiento de la situación proletaria (proletarischen Zustände) es una necesidad ineludible para poner en terreno firme, por una parte, a las teorías socialistas, y por la otra, a los juicios acerca de su justificación, y para dar fin a todas las idealizaciones y fantasías pro et contra.”[13] Incluso puede hablarse de un similar objetivo teórico-práctico de doppelte Aufgabe: en primer lugar una pretensión de lucha teórico-ideológica (utilizando todavía un hegelschen Jargon, la jerga joven hegeliana de moda en las vanguardias) y, a la vez, una pretensión de asentamiento y consolidación doctrinaria de la idea comunista, tal como lo afirmaba Engels en su libro sobre la clase obrera inglesa: “El Socialismo y el Comunismo alemanes han partido… de supuestos teóricos (theoretischen Voraussetzungen); nosotros, los teóricos alemanes, aún sabíamos demasiado poco del Mundo real como para que las condiciones reales nos hubiesen impulsado directamente hacia las reformas de esta ‘mala ‘realidad’. De quienes abogan públicamente por tales reformas, casi ninguno ha llegado al Comunismo de otro modo que mediante la reducción por Feuerbach de la especulación hegeliana (Feuerbachsche Auflösung der Hegelschen Spekulation)… Nosotros, los alemanes, necesitamos, sobre todo, un conocimiento de los hechos en torno a esta cuestión.”[14] Ya está aquí, in nuce, el propio programa de Gesellschaftsspiegel.

Lo cierto es que, como lo explican los propios editores en el Prospekt dirigido a lectores, colaboradores y “amigos de la Humanidad”, Gesellschaftsspiegel  se proponía “en orden de poder descubrir y aplicar los medios para la radical y permanente eliminación de los variados y artificiales males de nuestra vida social”, realizar un trabajo de análisis y difusión nuevo y necesario, ya que se trata “antes de todo saber en qué consisten esos males.” La idea de que la revista sea un colector, catalizador, un “andamio” que asegure niveles de organización necesarios tanto para la construcción de una organización como para la generación de una acción política eficaz sobre la Klasse de los proletarios, tribuna y Forum a la vez, también queda clara: “publicará descripciones generales, monografías, ítems estadísticos y casos individuales típicos, sirviendo así para colocar las relaciones sociales de todas las clases bajo una luz de verdad y ayudar de esa manera a las asociaciones que han sido diseñadas para eliminar los males sociales.” Aquí ya está implícita la revolucionaria idea de co-investigación obrera, de tanta repercusión enla nueva izquierda europea en los años 1960s,[15] el reflejo del espejo social y la constitución de la conciencia de clase como autoemancipación: la clase obrera debía tener conocimiento de sus cadenas tomando razón de su propia situación, que Marx perfeccionará en su madurez: “La condición de la clase trabajadora (Die Lage der arbeitende Klasse) será el primer y más importante objetivo de nuestra atención, pues su condición es el más deslumbrante de todos los males en la sociedad civilizada de hoy en día. Descripciones, información estadística, hechos individuales chocantes desde todos los rincones de Alemania, especialmente de aquellos en los que prevalece una inusual miseria, serán bienvenidos… las condiciones espirituales, morales e intelectuales de los trabajadores, además de su condición física, y aceptarán con mucho agrado informes sobre el estado de su salud en la medida en que es determinada por sus condiciones sociales, y en el estado de la educación y la moralidad del proletariado. Las estadísticas del crimen y la prostitución, especialmente cuando son acompañadas con comparativas de diferentes períodos de tiempo, localidades, o condiciones humanas, también serán tomadas en consideración.” Pero, aclaran los editores, que Gesellschaftsspiegel además “describirá la miseria en todas sus formas, y por ende a su vez la miseria de las clases altas; y en ésta descripción no se confinará a sí misma en artículos estadísticos y reportes de hechos reales sacados de la vida; abrirá sus columnas a la ficción en prosa y verso, pero sólo las que muestren la vida tal como es realmente. Descripciones basadas en la vida no serán menos bienvenidas que las descripciones tomadas de la vida.” No es casualidad que aparezca como objetivo la ilustración de la Entfremdung universal de la Humanidad en la sociedad burguesa; ya en Die heilige Familie de 1844, Marx señalaba en el capítulo dedicado a Proudhon que “la Clase Poseedora (besitzende Klasse) y la Clase del Proletariado (Klasse des Proletariats) representan la misma Autoenajenación humana (menschliche Selbstentfremdung).”[16] Aquí encaja a la perfección la colaboración de Marx sobre el suicidio en clases representativas de todo el cuerpo social burgués, o sea, denunciar die soziale Misère und das Bourgeois regime.

Es muy sugerente que en el Prospekt se destaque con luz propia la aparición de un concepto materialista científico, todavía tosco, intuitivo y sin pulir: el de besitzlosen Klasse, Clase No-Poseedora. Volviendo a la influencia en las vanguardias intelectuales y políticas en esta época de la obra de Engels, Die Lage der arbeitenden Klasse in England, podemos comprobar que utiliza allí el mismo concepto de ‘clase poseedora”. Al clarificar el uso terminológico y semántico, explica al lector que “siempre he empleado la palabra ‘Clase Media’ en el sentido de la Middle-Class inglesa… el cual significa, al igual que la palabra francesa bourgeoise, la Clase Poseedora (besitzende Klasse), y en especial, la Clase Poseedora que se diferencia de lo que ha dado en denominarse Aristocracia, la clase que se halla en posesión del poder estatal (Staatsmacht), directamente en Francia e Inglaterra, e indirectamente, como ‘opinión pública’ (öffentliche Meinung), en Alemania. De ese modo he empleado de continuo cono sinónimas las expresiones Obreros (Working Men) y Proletarios (Proletarier), Clase Obrera (Arbeiterklasse), Clase Desposeída (besitzlose Klasse) y Proletariado (Proletariat).”[17] También el joven Marx en esa época utilizaba indistintamente los conceptos de Klasse, Stand (Estamento) e incluso el barroco soziale Sphäre, como puede leerse en Die heilige Familie de 1844. El término, semánticamente un Urschlagwort que antecede a la futura “Fuerza de Trabajo”, la Arbeitskraft marxiana y que se mantendrá en casi todos los textos fundacionales (incluso en el famoso Manifest der kommunistischen Partei), seguramente ha sido acuñada&puesta en circulación por Hess, como vimos muy influenciado por la filosofía política de Fichte, que a su vez había asimilado la teoría revolucionaria de Graccus Babeuf (Hess llamaba a Babeuf el “Fichte francés”)[18] y asumido la figura de la mediación de los impropiétaires (no-propietarios), término que traduce como Nichteigenthümer, quienes en su combate de vida o muerte son los únicos capaces de extirpar la perniciosa institución de la propiedad, como lo señala en su Staatslehre (Doctrina del Estado).[19]

Lo cierto es que ya está reunida la famosa Troïka comunista y su primer fruto auténtico será un proyecto literario-organizativo, un auténtico órgano de partido: Gesellschaftsspiegel. Hasta tal punto existía un denominador común vital y profundo entre estos tres pensadores en esta época, que Hess será integrado al proyecto de escribir la obra maldita Die deutsche Ideologie.[20] Es interesante constatar que en el mismo número de Gesellschaftsspiegel de 1846 donde aparecerá el texto sobre el suicidio en el capitalismo, le antecede un artículo de Heinrich Bürgers sobre el pauperismo entre las clases populares de Bélgica; le sigue al de Marx uno de Schnak sobre el órgano joven hegeliano Die westphälische Dampfboot, y finalmente en la sección llamada “Nachrichten und Notizen und Rezension” sobre la crítica de Bruno Bauer al libro de Engels y Marx Die heiligen Familie. Además la revista realizaba una amplia cobertura de la literatura social o “sociologizante” de la época, como es el caso de la recensión de la excelente obra del sismondianne Buret: De la misêre des clasees laborieuses en Angleterre et en France,[21] o la del periodista torie Symons, Arts and Artisans.[22]


[1] Cuyo motto de su política editorial era: “Diario para la Alemania culta”, era un órgano joven hegeliano, su jefe de redacción era Karl Riedel y participaba casi todo el DoktorKlub berlinés: Rutenberg, Köppen, Buhl, Eduard Meyen, Bruno y Edgar Bauer, sus metas políticas-culturales se asemejaban a las de Gesellschaftsspiegel. Aquí, por primera vez, aparecieron impresas unas poesías salvajes de un joven y prometedor literato llamado Karl Heinrich Marx: “Wilder Lieder: Der Spielmann und Nachtliebe”, en: Athenaum, Zeitschrift fur das gebildete Deutschland, 23. I, 1841. Publicados por primera vez en MEGA (1), I, pp. 147-148. Ahora en: Marx, Karl/ Engels, Friedrich. Gesamtausgabe, MEGA (2), Abt. 1: Werke, Artikel, Entwürfe, Bd. 1: Karl Marx: Werke, Artikel, literarische Versuche bis März 1843, Akademie Verlag, Berlin, 1975, pp. 768-770. En la misma revista empezó a colaborar también un autodidacta Friedrich Engels con el seudónimo “Oswald”. La revista Athenäum fue clausurada por el gobierno prusiano en diciembre de 1841.

[2] Véase: Zlocisti, Theodor; “Vorwort”, en: Moses Hess der Vorkämpfer des Sozialismus und Zionismus, 1812—1875. Eine Biographie, Welt Verlag, Berlin, 1921, pp. 56-57.

[3] Sobre la Rheinische Zeitung y el rol central de Hess, como su actividad como redactor, véase: Silberner, Edmund; “Moses Hess als Begründer und Redakteur der Rheinischen Zeitung”, en: Archiv für Sozialgeschichte, Band IV,  1964, pp. 5-44.

[4] Julius Bäedeker de Elberlfeld era calificado por Engels como un kommunistische Buchhändler, un “librero comunista”; sin embargo Mayer, el biógrafo de Engels, lo califica de “señor muy medroso”; la revista tuvo que supenderse por la negativa de Bäedeker a luchar seriamente contra la censura y las presiones del gobierno. Hess lo intentó nuevamente, editando otra revista con Bäedeker con título parecido: Die gesellschaftlichen Zustände der zivilisierten Welt, que se editó en 1846 y 1847 con colaboraciones anónimas para evitar represalias.

[5] Carta de Engels a Marx, 17 de marzo de 1845; Marx, Karl/ Engels, Friedrich; Historisch-kritische Gesamtausgabe, MEGA (1), Abt. III, Band I, Moskau-Berlin, 1929, p. 16. Será tan complicado el tema de buscar editores confiables y robustos, que Engels diseñará un proyecto para constituir una sociedad editora comunista por acciones, escribiendo sus estatutos en 1846.

[6] Es también muy interesante analizar las listas de colaboradores o de corresponsales que se ofrecían voluntariamente tanto a Hess como a Engels, cuya composición social se nutre mayoritariamente de profesiones liberales y miembros renegados de la burguesía más culta. Véase: Silberner, Edmund; “Der ‘Kommunistenrabbi’ und der Gesellschaftsspiegel”, en: Archiv für Sozialgeschichte , Bd. 3, Verlag für Literatur und Zeitgeschehen, 1963, p. 95.

[7] Mehring, Franz; ibidem, p. 131.

[8] Tal como lo resumía Hess en una carta a Engels de noviembre de 1843: “den Kommunismus als die notwendige Weiterentwickelung der junghegelianischen Doktrin plausibel machte”.

[9] Mayer, Gustav; ibidem, p. 208.

[10] Véase: Silberner, op. cit., p. 211 y ss. Engels más tarde le comenta a Marx que la debate sobre el Comunismo se prolongó hasta la 1 de la madrugada, y que la asistencia a los mítines rondaba las 200 personas en promedio.

[11] Véase su primer y único número editado en septiembre de 1847 en Londres en: AAVV, Der Bund der Kommunisten. Dokumente und Materialen. Band 1, 1836-1849; Dietz Verlag, Berlin, 1983, p. 501 y ss.

[12] Engels, Friedrich; Die Lage der arbeitenden Klasse in England. Nach eigner Anschauung und authentischen Quellen; originalmente aparecida en Leipzig en 1845 publicada por el editor de los jóvenes hegelianos Otto Wigand con un prólogo en inglés; ahora en: Marx, Karl/ Engels, Friedrich; Werke, Band 2, Dietz Verlag, Berlin/DDR, 1972, pp. 225–506; en español: Marx, Karl/ Engels, Friedrich; Obras OME 6. La Sagrada Familia. La situación de la clase obrera en Inglaterra y otros escritos de 1845-1846; Grijalbo, Barcelona, 1978, pp. 249-544. La importancia de esta obra juvenil de Engels en el desarrollo del Comunismo en Alemania, y su duradera influencia en el desarrollo intelectual de Marx, ha sido destacada por Wolfgang Mönke: Das literarische Echo in Deutschland auf Friedrich Engels’ Werk «Die Lage der arbeitenden Klasse in England; Akademie Verlag, Berlin/DDR, 1965. Algunos incluso han afirmado que el capítulo III, “Die großen Städte”, es la mejor pieza literaria jamás escrita por Engels. Por cierto, una obra también influenciada por los binoculares rojos de Hess, quién había vivido de primera mano la miseria de las clases populares en la misma Inglaterra y descrito sus miserias cotidianas en libros y artículos.

[13] Engels, Friedrich; Die Lage der arbeitenden Klasse in England. Nach eigner Anschauung und authentischen Quellen, en: ibidem, p. 232.

[14] Engels, Friedrich, en: ibidem, p. 233.

[15] Véase en el caso italiano, el más notable en Occidente, el trabajo de Raniero Panzieri y el colectivo de los Quaderni Rossi; su artículo “Uso socialista dell’inchiesta operaia”, en: Quaderni Rossi, (5): 67-76, 1965; sobre la cuestión: Ferrero, P.: “La condizione operaia e l’inchiesta”; en: Pugliese, E. (ed.) L’inchiesta sociale in Italia, Carocci, Roma, 2008.

[16] Marx, Karl/ Engels, Friedrich; Die heilige Familie oder Kritik der kritischen Kritik gegen Bruno Bauer und Konsorten, IV Kapitel, “Proudhon”; en: Werke, Band 2, Dietz Verlag, Berlin/DDR, 1972, p. 38; en español: Marx, Karl/ Engels, Friedrich. Obras OME 6. La Sagrada Familia. La situación de la clase obrera en Inglaterra y otros escritos de 1845-1846; Grijalbo, Barcelona, 1978, p. 35.

[17] Engels, Friedrich, en: ibidem, p. 234.

[18] Hess estaba preparando una traducción al alemán del libro de Buonarroti: Histoire de la Conspiration pour l’Égalité dite de Babeuf, de 1828, de la cual en su Nachlass queda su estudio preliminar escrito en 1846.

[19] Staatslehre; en Fichtes Sämmtliche Werke, Volume IV, p. 384.

[20] Se trataba de la polémica de Hess contra el republicano burgués Arnold Ruge; véase el trabajo de Wolfgang Mönke, “Über die Mitarbeit von Moses Heß an der ‘Deutschen Ideologie’”; en: Annali dell’Istituto G. Feltrinelli, Bd. IV, 1963, pp. 438-509.

[21] Buret, Eugène; De la misêre des clasees laborieuses en Angleterre et en France, Paulin, Paris, 1840; la recensión en: Gesellschaftsspiegel, I. Band, 1845, p. 3-9.

[22] Symons, Jellinger Coockson; Arts and Artisans at Home and Abroad, with sketches of the progress of foreign manufactures; Simpkin&Marshall, Edinburgh, 1839; en: Gesellschaftsspiegel, I. Band, p. 6-7. Engels y Marx utilizarán sus informes sobre el estado de las clases populares en las Parliamentary Acts de 1839, como por ejemplo en Die heilige Familie de 1844 o en la Kritik de 1859.

Seremos directos: Te necesitamos para seguir creciendo.

Manteniendo independencia económica de cualquier empresa o gobierno, Izquierda Web se sustenta con el aporte de las y los trabajadores.
Sumate con un pequeño aporte mensual para que crezca una voz anticapitalista.

Me Quiero Suscribir

Sumate a la discusión dejando un comentario:

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí