Robert F. Kennedy Jr., sobrino del expresidente John F. Kennedy, había sido en sus inicios un típico demócrata, que incluso llegó a ser abogado ambientalista. No obstante, en los últimos 20 años, Kennedy Jr. se centró en la pseudociencia y se dedicó a promover teorías sobre las vacunas que contradicen el consenso científico. Donald Trump ha prometido otorgarle plena autonomía en la formulación de políticas sanitarias.
Robert F. Kennedy Jr. said Saturday that a second Trump administration would “advise all U.S. water systems to remove fluoride from public water.” The prospect of that reversal and other assaults on public-health expertise has already caused alarm. https://t.co/SzShiCBh15
— The New York Times (@nytimes) November 3, 2024
¿Qué propone este personaje nefasto? Cambios en los protocolos básicos de salud, eliminar la obligatoriedad de ciertas vacunas, prohibición de los pesticidas (aunque con delirantes fundamentos transfóbicos), «medicina alternativa» por encima de la atención sanitaria con respaldo científico.
Todos sus planteos parten de bases confusas y se desarrollan seudocientíficamente. Sin lugar a dudas se trata de un sujeto que no está del todo en sus cabales y que tiene una larga historia de anécdotas desagradables. Resta ver hasta que punto la sociedad estadounidense podría tolerar a personajes de este tipo.