Su lugar será ocupado por Américo Cristófalo, hasta ahora vicedecano, quien fue votado el día de hoy en una sesión del Consejo Directivo de la facultad, llamada fuera de época de clases, por la mayoría automática que tiene el sector alineado a la gestión en este organismo. Además, también se votó como vicedecano a Ricardo Manetti, quien era director de la carrera de artes.
La sesión fue básicamente un gran teatro en donde la gestión autoproclamaba sus “grandes logros” y se embanderaba con la “defensa de la educación pública”. Sin embargo, los 6 años de gestión de Morgade y Cristófalo fueron años de adaptación completa a la miseria presupuestaria de la universidad y el macrismo. En las luchas de 2016 y 2018 contra los recortes de presupuesto educativo por parte del macrismo, fuimos les estudiantes quienes tomamos la facultad luchando junto a nuestres docentes quienes enfrentamos esas políticas de ajuste. Mientras tanto, Morgade, mientras decía ser opositora al rector de la UBA Barbieri y al macrismo, ni siquiera se dignó a votar en contra del recorte presupuestario, votando abstención en ambos casos.
La autoproclamada “decana feminista”, que habló sobre dar políticas de género y el protocolo, oculta que fue una gestión que hizo todo lo posible por amparar a Dante Palma frente a las gravísimas acusaciones que tenía por violencia de género. Sin pelos en la lengua, en una sesión del Consejo Directivo en donde nos habíamos movilizado contra este docente abusador, Cristófalo (en ese momento vicedecano, quien asume ahora el decanato) llegó a decir que Palma “es un perseguido político como Milagro Sala” (sic). Nuevamente, fuimos el movimiento estudiantil y de mujeres de la facultad quienes nos movilizamos, logramos que se lo separara del cargo y que se empezara a aplicar un protocolo frente a la violencia de género (que hasta el momento era tan solo un mail “para recibir denuncias”).
La gestión que hoy habló de defender a les trabajadores y de la democratización mantuvo cientos de trabajadores de la facultad con rentas inadecuadas o categorías más bajas de las que les corresponden y avaló que año a año se recorten prácticos en todas las carreras. También fue la que este año quiso pasar por encima del claustro no docente nombrando a dedo una funcionaria como Cargo 1, una avanzada que fue derrotada por la importante lucha desarrollada por les compañeres no docentes este año a través del paro y la movilización.
Párrafo aparte merece la intervención del Colectivo, la nueva conducción del CEFYL, que integra el espacio político de la gestión. El día de hoy se abstuvieron de la votación de Cristófalo con un argumento formal de que “no se debatió en el movimiento estudiantil” pero que “celebraban” la nueva etapa y la incorporación de Morgade al Ministerio de Educación. Es claro que la oposición a esta votación no puede ser solo por un problema de forma, sino por el contenido que expresa: hoy resultó electo un nuevo decano que es parte de esta política de adaptación a la miseria presupuestaria.
En definitiva, estos 6 años de gestión de Morgade han sido los de una gestión que no enfrentó el ajuste en la facultad sino que se adaptó profundamente. Su alineamiento con el nuevo gobierno nacional de Alberto Fernández, que viene planteando un pacto social y que hay que “dejar de lado los reclamos para sacar adelante el país”, lo que solo significa que nuestras necesidades como estudiantes, los reclamos docentes y no docentes no van a estar en agenda. Por lo tanto, desde el ¡Ya Basta! nos oponemos a la elección de Cristófalo como decano y así como seremos oposición por izquierda a este nuevo gobierno de Fernández, también seguiremos peleando por la independencia política del movimiento estudiantil frente a la gestión y todo gobierno.