La marcha educativa del 23 de abril, con más de un millón de personas en las calles en defensa de la educación pública y contra el plan de Milei, hizo temblar al gobierno. Fue el punto más alto de un conjunto de acciones educativas desde antes de que comiencen las clases, con cacerolazos y ruidazos educativos, asambleas masivas, clases públicas y más acciones de lucha y organización. La defensa de la universidad es un tema que atraviesa a toda la sociedad y marca un punto muy claro de oposición contra el plan del gobierno, que busca destruirla. De hecho, según los últimos informes, las universidades ya gastaron el 97% del presupuesto que tienen asignado, lo que pone la situación al rojo vivo, y plantea una continuidad de esta pelea que muy pronto tendrá nuevos episodios.
Desde el ¡Ya Basta! – Nuevo MAS venimos insistiendo desde antes que inicien las clases con que las universidades iban a ser un foco de organización contra los ataques del gobierno, en defensa de la educación pero también contra todos sus ataques de conjunto. Es por eso que venimos trabajando para construir un estudiantazo para derrotar el plan de Milei, con ocupaciones y acciones contundentes, que diga Basta Milei y derrote su ataque sobre las universidades y se unifique con la pelea de los trabajadores contra todas las medidas del gobierno, rechazando el DNU, la Ley Ómnibus, el protocolo y el conjunto de los ataques de Milei.
En ese camino, es fundamental clarificar la orientación política. Nuestra pelea es por derrotar todo el plan del gobierno. Por eso peleamos por un estudiantazo que vaya más allá, que cuestione al gobierno de Milei y que tenga una dirección independiente. En ese sentido, rechazamos no sólo el cierre de las universidades que impulsa el gobierno sino también su vaciamiento y el auto ajuste que aplican las gestiones, tanto radicales como peronistas. Su orientación no es derrotar el plan del gobierno sino negociar algunos puntos más del presupuesto. Decisiones como la del rectorado de la UBA (y aplicado por todos los decanos de todos los colores políticos) de apagar las luces y calderas en las facultades, solo sirve para allanarle el camino al ajuste del gobierno, degradando nuestra educación y avalando cursar y trabajar en la universidad en pésimas condiciones, sin luz, con frío y sueldos miserables, lo que solo puede significar que miles se vayan de las universidades.
En el mismo sentido actúan las conducciones mayoritarias de los centros de estudiantes y federaciones, el radicalismo-Franja Morada y el peronismo. Los primeros son parte de la “oposición colaboracionista” que le votó la Ley Ómnibus al gobierno, y en los centros de estudiantes se niegan a cualquier instancia de organización como pasó en Psicología, donde la conducción del CEP, el EDI, buscó hasta último momento boicotear la asamblea, solo para tener que aparecer a figurar tras verse desbordados por los más de mil estudiantes que coparon Independencia y los repudiaban. Por su parte, conducciones peronistas como la del CEFyL buscan evitar que la pelea educativa de un salto y vaya más allá, buscan que las acciones sean chicas y controladas, sin cortar la calle ni darles continuidad y haciendo todo lo posible por llevar a los estudiantes detrás de las gestiones “progres” que nos cortan la luz aplicando el recorte del gobierno, jugándose de manera agresiva para tratar de reventar cualquier desborde.
Por el contrario, de lo que se trata es de impulsar la pelea a fondo por la educación pública, no para negociar migajas sino para derrotar al gobierno, porque defender la educación es incompatible con Milei. En ese camino, construir un estudiantazo que ocupe todas las facultades es fundamental. Desde el ¡Ya Basta! queremos retomar la tradición del Cordobazo y el Mayo Francés, impulsamos que los estudiantes se unifiquen con la pelea de los trabajadores, que vayan a las puertas de las fábricas a sumarlos a la pelea. Se trata de una lucha que tiene que ser contra todo el plan del gobierno de Milei, rechazando la nueva Ley Ómnibus, el DNU, el protocolo antiprotesta y todas sus medidas.
El movimiento estudiantil se levanta en todo el mundo
La irrupción del movimiento estudiantil en nuestro país se da en un contexto de inmensas movilizaciones de la juventud en todo el mundo. En las últimas semanas, ante la brutal ofensiva genocida del estado de Israel sobre la Franja de Gaza, las innumerables muestras de apoyo por parte de estudiantes de distintas universidades del mundo a la lucha del pueblo palestino y en rechazo a la masacre sionista en Gaza son un acto de lucha emocionante.
Les estudiantes pusieron en pie acampes y otras medidas de lucha en cientos de universidades, con epicentro en la Universidad de Columbia, en Nueva York y UCLA, en Los Ángeles, y medidas de lucha en universidades de Europa, Latinoamérica, en India y todo el mundo. Estas acciones retoman la experiencia de lucha y movilización estudiantil contra la guerra de Vietnam del siglo pasado, y son llevadas adelante por estudiantes y activistas anti-coloniales, que unen la pelea contra el genocidio al pueblo palestino con la historia de lucha por los derechos civiles en EEUU, contra el apartheid en Sudáfrica, contra toda la historia imperialista de EEUU, Francia y demás países.
De manera vergonzosa, los diferentes gobiernos están respondiendo a estas manifestaciones con represión, declarando su apoyo incondicional al estado de Israel. En Columbia, la policía irrumpió en el edificio Hamilton Hall rompiendo las ventanas y llevando detenidos a más de 200 jóvenes, con el aval del gobernador de Nueva York y el presidente Biden. En total, en EEUU ya se cuentan más de 2000 detenciones. Pero ante la represión los estudiantes no se retiran, sino que redoblan la pelea instalando nuevos acampes aún más masivos que se siguen extendiendo.
Desde nuestra Corriente Internacional Socialismo o Barbarie, venimos impulsando acampes en Francia, Brasil, Costa Rica, en apoyo a esta causa, repudiando el genocidio en Gaza, exigiendo la ruptura de los vínculos de las universidades con instituciones sionistas, rechazando la represión y persecución hacia les estudiantes y en apoyo a este estudiantazo mundial por Palestina. En Argentina desde el ¡Ya Basta! ya hemos comenzado con acciones de visibilización como radios abiertas, e impulsamos la realización de acciones unitarias como acampes en las facultades, para sumarnos con todo a esta pelea que nos conecta con la juventud anti imperialista de todo el mundo.
Por el camino del Primero de Mayo unitario
Luego de la marcha educativa que significó un gran golpe para el gobierno, los distintos sectores del régimen político salieron a su rescate. La media sanción de la Ley de Bases fue posibilitada por los votos de la “oposición colaboracionista” donde están los radicales que días antes decían defender la universidad. Pero la votación también pasó por la inacción del peronismo y la burocracia, que se negaron a movilizar en rechazo a la ley y hasta acordaron el contenido de la contra reforma laboral. Sólo la izquierda movilizó frente al Congreso, mientras la CGT llamaba a medidas luego de la votación, dejando pasar todos los ataques del gobierno
El contraste se dio el pasado Primero de Mayo, Día Internacional de las y los Trabajadores, donde se realizó por primera vez en una década un acto unitario de toda la izquierda. Se trata de un hecho importantísimo por el que desde el Nuevo MAS veníamos batallando incansablemente. Fue fundamental establecer una tribuna independiente, que unifique a todos los sectores que queremos derrotar el plan del gobierno, con los trabajadores y sindicatos combativos como el SiTraRepA y el SUTNA, con el movimiento estudiantil independiente, agrupaciones feministas, las asambleas barriales y movimientos de trabajadores ocupados y desocupados, junto a la izquierda. Un acto independiente y unitario de los sectores en lucha contra el gobierno, que marcó un contraste con la convocatoria de la CGT, que venía de acordar con Milei la contra reforma laboral incorporada en la Ley de Bases que tuvo media sanción en diputados, votación ante la que la burocracia no movió un dedo en un acto de traición inmenso.
El acto unitario del Primero de Mayo mostró el camino a seguir. Ante la situación nacional donde el gobierno de Milei lleva adelante su plan de guerra y es sostenido por el régimen político, pero a su vez enfrenta enormes movilizaciones en la calle como la del 23 de abril, hay que fortalecer esta orientación para que la izquierda pueda emerger como una alternativa, unificando las peleas contra el gobierno y preparando un plan de lucha para derrotarlo.
Con la unidad de la izquierda por un estudiantazo para derrotar a Milei y para recuperar los Centros de Estudiantes
Desde el ¡Ya Basta! creemos que tenemos que avanzar sobre esa base que construimos para poder dar una pelea en común en todos los terrenos. Pero no toda la izquierda viene interviniendo en este sentido. Algunos sectores, como el PTS, están explícitamente en contra de la política de construir un Estudiantazo y rechazan cualquier intervención política en el conflicto educativo, en nombre de que sería “sindicalista” y por lo tanto la orientación “política” sería hablar de la votación en el Congreso de la Ley de Bases. Esta supuesta polémica es absolutamente falsa, por el contrario, de lo que se trata es de orientar la lucha educativa con la enorme potencia que mostró en las calles hacia una política para ganar, que implica el enfrentamiento con todo el plan de Milei, desde ya movilizando contra la Ley Omnibus, el DNU y el protocolo, pero sin regalarle las consignas educativas a los rectores y el peronismo, que aplican el auto-ajuste y solo buscan negociar con el gobierno.
En realidad, esta postura del PTS esconde su adaptación al parlamentarismo y su retroceso en el movimiento estudiantil, donde no dirigen ningún centro de estudiantes, y por lo tanto han llegado a teorizar que ningún centro sirve y por lo tanto hay que formar espacios paralelos. Eso los ha llevado no solo a abandonar la disputa política por la orientación del conflicto educativo, sino también a atacar a centros de estudiantes independientes y que vienen estando en primera línea contra el gobierno, como el Nuevo CEAA (Audiovisuales UNA), al que el PTS en alianza sin principios con La Mella-Patria Grande buscan destruir. Es notorio como en todas las facultades, en lugar de impulsar una actuación común para derrotar los ataques del gobierno, esta organización pone sus fuerzas en atacar al ¡Ya Basta! únicamente buscando su autoconstrucción a expensas del movimiento.
Por su parte, el Partido Obrero tiene como centro de su estrategia al movimiento piquetero, cuando lo más activo de la vanguardia que enfrenta al gobierno se viene nutriendo de sectores mas estructurales. Esto los lleva a un comportamiento errático como participar equivocadamente de la movilización de la CGT el primero de mayo, en el marco de la traición de la burocracia de haber acordado con el gobierno la contra reforma laboral. Esa movilización era una acción para descomprimir y hacer de cuenta que hacían algo, cuando dos días atrás pegaron el faltazo en Congreso ante la votación de la Ley de Bases. A su vez, en facultades como Filo van detrás de la política de La Mella y el PTS contra el estudiantazo: en vez de jugarse al desborde, rechazan acordar con el ¡Ya Basta!, un grave error político, porque dando peleas comunes la izquierda puede ganar esas asambleas e impulsar la lucha contra el gobierno de manera independiente.
Sin embargo, estos son debates políticos que no niegan de ninguna manera la necesidad de poder actuar de manera común frente a los grandes desafíos que tenemos por delante. Entendemos que el acto unitario del Primero de Mayo que construimos es un gran punto de apoyo en este sentido. De la misma manera, hemos actuado de manera común (con nuestros matices por supuesto) en diversas instancias de lucha desde el 20 de Diciembre hasta ahora en el conjunto de la izquierda. Consideramos fundamental poder avanzar en esta pelea común en todos los terrenos para poder derrotar al gobierno y que la izquierda pueda fortalecerse como una alternativa, desbordando a las direcciones burocráticas.
En ese sentido, queremos impulsar la unidad de la izquierda para dar una batalla común por construir un estudiantazo que derrote el plan de Milei. Un estudiantazo que desborde a las direcciones burocráticas radicales y peronistas de los centros de estudiantes y también le imprima a ese enorme movimiento que se llenó las calles el 23 de abril una orientación política clara para ganar: no es negociando con el gobierno sino enfrentando su plan de conjunto. Un estudiantazo también que desde las universidades, permita ir a las fábricas para unificarnos con los trabajadores para enfrentar todo el plan de Milei, la Ley de Bases, el DNU, el protocolo y todos sus ataques.
En este camino también tenemos que recuperar nuestros espacios de organización como son los Centros de Estudiantes y Federaciones. Por eso, impulsamos también listas unitarias, que contemplen el desarrollo y peso específico de las organizaciones para dar la pelea para recuperar los Centros de Estudiantes. Es clave recuperar estos espacios para potenciar la pelea que tenemos por delante y poner a todo el movimiento estudiantil en pie de lucha para derrotar a Milei. De la misma manera, desde el ¡Ya Basta! apostamos al desborde y queremos impulsar instancias de organización independiente alternativas a los centros de estudiantes de las facultades donde dirige la Franja Morada o conducciones atadas al kirchnerismo, que buscan frenar el estudiantazo y la pelea por la educación pública.