Hace ya un año que Sergio y un grupo de Trabajadores del área de Alumbrado Público del municipio de Quilmes, gobernado por el intendente de Cambiemos Martiniano Molina, fueron despedidos y puestos a disposición de la justicia local por el solo hecho de reclamar por los derechos de los Trabajadores municipales.
Para el despido, arbitrario y discriminatorio, se adujo un supuesto vencimiento de contratos. Los mismos contratos que se venían renovando en forma automática por años, el intendente Molina dispuso interrumpirlos dejando así a casi veinte trabajadores del sector en la calle.
La pelea comenzó en dos planos. En la calle, encarando distintas medidas de acción directa y de visibilidad; y en la justicia laboral por un lado, instando las acciones de reinstalación (aclarando que Sergio era delegado al momento de su despido) y en sede penal por otro defendiéndose de las acusaciones de los funcionarios municipales.
Pero a un año de los despidos pareciera que la situación conduce a vía muerta. El municipio no retrocede en su decisión, y la justicia laboral no ha resuelto. Es más, flota por los pasillos del palacio municipal que el intendente Molina tendría en carpeta para este cambio de año nuevos despidos encubiertos en “vencimientos de contratos”, que no se habrían operativizado por el acampe que decidieron montar Sergio y los trabajadores de alumbrado público en las puertas de la municipalidad.
El día martes pasado nuestro compañero Luis Di Bartolo participó de la asamblea realizada en dicho acampe, llevando la solidaridad del Nuevo MAS y de la Corriente Sindical 18 de Diciembre y proponiendo medidas que permitan visibilizar el conflicto. Como resultado de esa asamblea se resolvió llamar a conferencia de prensa para el día viernes 11 a las 10 hs en las puertas de la Municipalidad de Quilmes a la que adherimos y convocamos.
Corresponsal.
