Los trabajadores y trabajadoras del establecimiento llevaron a cabo una medida de fuerza debido al incumplimiento del acuerdo paritario por parte de la patronal, quien terminó accediendo a pagar el aumento pactado.
A pesar de que la paritaria ya se encontraba cerrada y rubricada ante Ministerio de Trabajo, la patronal explotadora decidió otorgar un 4% de aumento en lugar del 14% que estaba pactado. Esto desató la reacción de los empleados/as que llevaron a cabo una concentración en la puerta del frigorífico.
La respuesta del gobierno municipal de Guillermo Montenegro (PRO) y de Milei fue mandar a la Prefectura Nacional a reprimir ferozmente con gases lacrimógenos y balas de goma a quienes se encontraban luchando por su salario, en un contexto donde es cada vez más difícil llegar a fin de mes.
Bullrich, en lugar de estar mandando recursos a El Bolsón para sofocar los incendios y de abrir una investigación seria sobre los autores intelectuales del desastre ambiental que se está causando en la Patagonia, se dedica a perseguir trabajadores/as que luchan por sus derechos. Montenegro, por su parte, hace de portavoz del gobierno nacional, con discursos nefastos y retrógrados mientras busca militarizar las calles de la ciudad. Hacemos responsable al gobierno municipal y nacional por este ataque contra el derecho a la protesta de los y las trabajadoras.
Desde el Nuevo MAS y la Corriente Sindical 18 de Diciembre, nos solidarizamos con los trabajadores reprimidos y saludamos el triunfo en su pelea, ya que en las últimas horas la patronal se comprometió a pagar el aumento firmado. La pelea del frigorífico La Bella debe ser un ejemplo para los trabajadores y trabajadoras de la ciudad para salir a pelear contra la precarización laboral y el ajuste del gobierno de Javier Milei.