
Ya transcurrieron algunas semanas desde la represión comandada por Aníbal Fernández en Villa Mascardi y el rechazo de la población al accionar del Estado sigue aumentando. El pasado 20 de octubre, decenas de organizaciones sociales, de DDHH, sindicales y políticas realizaron una conferencia de prensa junto a la comunidad mapuche en la ciudad de Bariloche.
«En Asamblea del día 17 de Octubre, las organizaciones de DDHH, sociales, sindicales, políticas y ambientales abajo firmantes junto a las vecinas y vecinos independientes y del Pueblo Mapuche Tehuelche venimos a esta conferencia de prensa a exigir:
El cese de la persecución a Oscar Moreno, reconocido trabajador de prensa e integrante del pueblo Mapuche Tehuelche, quien ha debido soportar las infundadas acusaciones y posterior denuncia penal por parte del abogado Ernesto Saavedra», decía el comunicado leído en la conferencia de prensa el viernes pasado.
«Madres mapuche junto a sus niñxs con prisión domiciliaria y compañeras mapuche detenidas en la Policía Aeroportuaria, aún hoy con una causa a la que no pueden acceder porque la jueza federal Silvina Domínguez prorrogó el secreto de sumario». En estos términos relataban las organizaciones reunidas las detenciones que indignaron a todo un país.
Entre los adherentes se contaron a organizaciones del pueblo mapuche, organizaciones sindicales como la CTA de los Trabajadores de Río Negro y el SIPREBA Bariloche, organizaciones de Derechos Humanos, organizaciones feministas como Las Rojas. También firmaron el comunicado diputados y partidos políticos de izquierda, como fue el caso del Nuevo MAS (Movimiento al Socialismo).
Pero la adhesión más destacada fue quizás la de Nora Cortiñas, Madre de Plaza de Mayo de la Línea Fundadora. «Vamos a comunicar al mundo entero esta violación a los DDHH que se está cometiendo con las mujeres, las comunidades y los niños», declaraba la referente de DDHH en un audio enviado a la comunidad mapuche de Río Negro.
La fundadora de Madres de Plaza de Mayo arrastra una larga historia de lucha por los DDHH que data de la última dictadura militar. A lo largo de las décadas, su solidaridad se convirtió en un abrazo para cada lucha contra la represión en todas sus formas. No resulta raro que su presencia (y su voz) genere emoción en cada rincón del país.
«Norita, sabemos que tu voz le puso palabras a la historias más tristes de este país, qué tu voz difunde las luchas de los pueblos. Hoy necesitamos, una vez más, que tu voz haga eco de nuestras historias, de nuestras luchas y de la injusticia que estamos viviendo», decía el comunicado que la comunidad mapuche envió a Nora Cortiñas para solicitarle su apoyo.
«Querida Norita desde la ruka mapuche en furilofche te saludamos, nosotras, presas políticas mapuche. Apresadas por el estado argentino luego del violento e impune desalojo, perpetrado por más de 250 efectivos de las fuerzas represivas de este estado en la madrugada del 4 de octubre. En estos momentos 6 mujeres mapuches de La lof lafken winkul mapu y 9 niñxs que van desde los 3 días hasta los 12 años estamos encerradxs por una causa montada con la completa impunidad del poder judicial y con el aval del poder político».
La detención de mujeres embarazadas y menores de edad, así como su posterior traslado y detención en distintos puntos del país es quizás la muestra más descarnada de la brutalidad del accionar policial. Una represión feroz que tuvo por objetivo barrer del mapa al «problema mapuche» y que Aníbal Fernández decidió justificar con argumentos de escritorio.
«Quienes consideran que el cumplimiento de la ley y de las órdenes judiciales es un menú a la carta, no entienden lo que es vivir en un sistema republicano», dijo el ministro de Seguridad hace algunos días. Tal parece que el modelo estatal que defienden Fernández y el oficialismo es el de un Estado represivo, que perpetúe la opresión histórica sobre los pueblos originarios.
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