
Una de las columnas más grandes de la marcha del lunes de ATE fue la de los y las trabajadoras de Salud. Ese Ministerio ya había protagonizado una batalla muy importante cuando al inicio del gobierno de Macri, habían intentado desarmar completamente los Programas de Salud Sexual y Reproductiva. En aquella oportunidad se supieron rodear de otros sectores, como el movimiento de mujeres que salió a pelear en conjunto.
Esta vez, frente a los brutales anuncios de la degradación del Ministerio en una Secretaría dependiente de Desarrollo Social, nuevamente los y las trabajadores salieron a responder con fuerza. El mismo lunes que se supo la noticia se movilizó a la marcha convocada por ATE Capital, resolviendo que no iban a dejar pasar el ataque. El martes hubo asambleas sectoriales y una gran asamblea de todo el Ministerio donde votaron un abrazo al Ministerio.
Esta acción fue masiva, no sólo participaron quienes que trabajan en ese edificio, si no que se acercaron trabajadores y trabajadoras de Institutos y Hospitales, como los compañeros y compañeras del Posadas. También estaban presentes Residentes y Concurrentes de Hospitales de la CABA, y las organizaciones como la Corriente Sindical 18 de diciembre que nos acercamos a dar nuestro apoyo a su lucha.
El cierre del Ministerio no es otra cosa más que despidos y recorte del Presupuesto. En un área tan sensible como lo es la Salud Pública; es que el gobierno no sólo quiere dejar sin trabajo a miles y miles de estatales, busca además reventar todas las prestaciones a la población en general.
Uno de las áreas afectadas es la Dirección Nacional de SIDA, Enfermedades de Transmisión Sexual, Hepatitis y Tuberculosis, cuyo director renunció apenas se supo del cierre y todavía no está claro el panorama. Las trabajadoras de los Programas de Salud Sexual y Reproductiva denunciaron que al vaciamiento que vienen sufriendo – es casi nula la entrega de anticonceptivos en los hospitales del interior – esta medida va a decretar el cierre de hecho de esos programas. Lo mismo va a ocurrir con la entrega de remedios a las farmacias de hospitales, que provee a los sectores más pobres que no cuentan ni con obra social.
La jornada de hoy demostró que en Salud sobran ganas de luchar, una acción inmensa que logró imponerle a las conducciones burocráticas la unidad en las calles, haciendo un corte ATE y UPCN. Esas divisiones no tienen nada que ver con el interés de los y las trabajadoras de frenar el ajuste del gobierno.
El viernes 6 está convocada una conferencia de prensa en la puerta del Ministerio, hay que rodear de solidaridad esa y cada una de las acciones que decidan los y las trabajadoras en sus asambleas, hay que ayudar a que este proceso que recién comienza se profundice, en la perspectiva de unificar cada lucha, porque para que gane Salud, tenemos que pelear todos y todas juntas!