Desde la Corriente Nacional Docente Carlos Fuentealba y el Nuevo MAS y la agrupación estudiantil Ya Basta-Las Rojas de la Universidad de Lomas de Zamora, brindamos nuestra solidaridad con la lucha que viene desarrollando la Asamblea de Trabajadores de la fábrica CANALE. Finalizada la movilización local desarrollada el día de ayer, expresamos al conjunto de los trabajadores la necesidad urgente de unificar las luchas por abajo, ante un Gobierno que ya no se aguanta más. Tomar de ejemplo y crear lazos con la lucha que vienen llevando los trabajadores del Astillero Río Santiago, Mineros de Río Turbio, Télam, etc. que marcan el camino respecto a la necesidad de comprender que estos conflictos forman parte de una lógica general por parte del Gobierno de Macri de darle vía a los despidos, cierres y usurpación de derechos, hacia dentro del Estado y en el sector privado; en complicidad con el Ministerio de Trabajo y amparando a los empresarios que siguen su lógica de todo para los de arriba y nada para los de abajo.

Advertimos y venimos diciendo que las Direcciones Sindicales (distintas variantes k y del PJ) tienen firmado un pacto con el Gobierno de dejarlos gobernar. En ese juego las estrategias son variadas: mantener aislado cada conflicto, armar movilizaciones sectorizadas, sentarse a negociar a espaldas de los trabajadores ubicaciones político-electorales de cara al 2019, evitar todo tipo de desborde de los que salen a luchar, etc. mientras le dan aire al Gobierno. De no romper estas barreras de contención, se hace muy difícil caminar en materia de triunfos para los laburantes. Y el Gobierno lejos de retroceder, avanza. Está el ejemplo muy reciente y cercano de la entrega que hizo la UOM de Caló, abandonando a cientos de trabajadores de Stökll (que hoy, hasta reciben despidos con causa y procesamiento penal, en el más completo abandono y perdieron su puesto de trabajo de un día para el otro). Por eso decimos: ninguna confianza en los organismos como el Ministerio de Trabajo (de un Gobierno que tiene como enemigo a la clase obrera) que dicen ser mediación y fallan siempre para la patronal, ni tampoco en las cúpulas sindicales que al sostener la gobernabilidad de Macri, se transforman de inmediato en cómplices del ajuste. Macri no se aguanta más. Paro activo 24 y 25, y movilización para unir las luchas.

Entrevista al cuerpo de delegados 

Corresponsal: ¿Qué situación se vive en Canale hoy?

Venimos de un conflicto que, en realidad, arranca a fines de 2014, principio de 2015 cuando se empieza a acumular el atraso en los pagos, llegan a acumular tres meses de deuda y esa deuda se arrastra durante dos años. En el 2017 la empresa llega en acuerdo de acreedores a la regularización de los pagos. Después de un año, llegamos a hoy, precisamente en abril de este año vuelven los atrasos en los pagos hasta la fecha. Nos cortaron las obras sociales, los seguros de vida y la fábrica está parada por falta de trabajo, mientras crece la angustia y la incertidumbre entre los compañeros.

Corresponsal: ¿Se veía venir que podían volver a tener conflicto?

No, por el contrario. Veníamos trabajando bien, produciendo todo el verano y principio de año. No hubo pedido preventivo de crisis.

Corresponsal: ¿Qué respuesta le da a sus reclamos la patronal?

Nosotros siempre hemos estado dispuestos a dialogar, hemos brindado colaboración, se han reubicado en los distintos puestos de trabajo los compañeros con el fin de no entorpecer la producción y cooperar en lo que demandaban (acordado en asamblea). Por parte de la empresa siempre intransigencia con los pedidos que le hacíamos. (Pedidos básicos y percibir resarcimientos económicos) Siempre fueron con la negativa. Aún siendo financiados por el grupo inversor GREYLOCK CAPITAL , mientras la empresa vuelve a exportar sus productos como hace 8 años que no se ve, los sueldos no aparecen.

Corresponsal: ¿Qué queda de la movilización de ayer?

Primero destacar el proceso que se viene dando en la fábrica, proceso de fortalecimiento de la asamblea. Y lo que se vio es el resultado de ese trabajo entre todos los trabajadores, porque no es un trabajo personal sino de todos y cada uno de los compañeros. Y que hayan salido a las calles. Destacamos eso. Y las palabras de apoyo de toda la gente del lugar, ver lágrimas en los vecinos a medida que avanzábamos, nos emociona. Se podía ver en ellos la expresión de toda esa angustia que hay acumulada, del malestar que se está sintiendo y también irrumpir en el cerco mediático es fundamental.