Tal como reportamos el lunes, el co-director palestino del documental No other Land, Hamdan Ballal, fue secuestrado por miembros del ejército israelí la noche del lunes (24).
Su detención ilegal se produjo luego de que fuera atacado a pedradas por una banda de colonos sionistas. Al resultar herido por los ataques, Ballal llamó a una ambulancia y, cuando estaba siendo tratado por los paramédicos, fue hostigado por soldados israelíes, quienes se lo llevaron sin informar sobre su destino.
Debido al escándalo internacional que generó la noticia, Ballal fue liberado hace unas horas. Como denunció Basel Adra (también codirector del largometraje), debido a los golpes que recibió fue necesario trasladarlo a un hospital:
“Hadam fue liberado y actualmente está en el hospital en Hebrón recibiendo tratamiento. Él fue golpeado por soldados y colonos en todo su cuerpo. Los soldados lo dejaron con los ojos vendados y esposado en la base militar la noche anterior”.
Hamdan has been released and is currently in the hospital in Hebron receiving treatment. He was beaten by soldiers and settlers all over his body. The soldiers left him blindfolded and handcuffed throughout of military base last night. pic.twitter.com/Eis0J3CS24
— Basel Adra (@basel_adra) March 25, 2025
Este episodio no hace más que confirmar la brutalidad de la ocupación colonial y racista que ejerce el Estado sionista de Israel en contra del pueblo palestino.
En «No Other Land» se muestra la tenaz resistencia de la comunidad de Masafer Yatta, en Cisjordania, contra los constantes intentos de desplazamiento forzado del ejército israelí y los grupos de colonos sionistas. Es una mirada micro de lo que significa vivir bajo la ocupación colonial y expone los métodos que utiliza Israel para desplazar a las comunidades rurales de Cisjordania: destrucción de los hogares, escuelas, parques de juego infantil, gallineros y la infraestructura que abastece a la comunidad de servicios básicos; realización de detenciones arbitrarias; ataques de los colonos (que son “clanes” paramilitares de ultraderecha); empleo del aparato judicial para “legitimar” la apropiación de tierras; etc.
Tras su premiación en la ceremonia de los Oscar, el documental ganó notoriedad a nivel internacional. El secuestro de Hamdan Ballal fue una evidente represalia por su labor en la difusión de la barbarie de la ocupación sionista.