
El 11 de abril nos reunimos en el Anexo del Congreso militantes feministas y diputadas, con el propósito de discutir la fecha y modalidad de la octava presentación del proyecto de ley por el aborto legal, seguro y gratuito. Tendrá lugar el 28 de mayo (Día Latinoamericano y del Caribe de la Salud de las Mujeres) y se realizará a la par que una concentración frente al Congreso y una conferencia de prensa en el interior del parlamento. Al proyecto se le han incorporado algunas reformas, que permiten que se vuelva a presentar y no quede archivado tras haber sido tratado en el 2018.
Que la voz de la marea verde se escuche en las elecciones
A pesar de que en esa reunión todas las integrantes defendíamos la legalización del aborto, los debates internos que cruzan a los partidos tradicionales respecto a este tema estuvieron sobre la mesa. Es que en un año electoral, a pesar de que en la Cámara de Diputados supimos obtener la media sanción, las mayorías parlamentarias no están tan seguras de querer “meterse” con la cuestión. De hecho, lejos de esto, buscan esconder la pelea por el derecho al aborto, bajando los pañuelos de la lucha e intentando que ni se hable del proyecto de ley de la Campaña en las elecciones. Ni el peronismo, ni el radicalismo, ni Cambiemos tienen armadas y cerradas sus listas y esos problemas de la política burguesa terminan incidiendo en el asunto. Por ejemplo: ¿Cómo podría el kirchnerismo hablar del aborto legal con el papista Grabois y el antiabortista Manzur en su boleta? Para este sector, que gobernó 12 años en contra del derecho a decidir de las mujeres, es más importante su “frente anti-Macri”, que las reivindicaciones y necesidades de las mujeres, los trabajadores y la juventud. Excusan su silencio al respecto alegando que “hay temas más importantes” de los que hablar, como el hambre y la miseria. Pero se trata de un encuadre completamente posibilista: por supuesto que en las elecciones hay que hablar de la pobreza en la que se ve sumido el 30% de la población, los tarifazos, los despidos… Ocurre que ese planteo es una falacia completa. Por un lado, porque lejos de contraponerse, la pelea por el aborto legal y la lucha contra las políticas de hambre del macrismo van de la mano. Por otro, porque en verdad el peronismo siquiera está hablando de la pobreza ni de cómo se solucionaría: Cristina está en completo silencio, Kicillof plantea que no hay que romper con el FMI y la burocracia sindical, que ha sido cómplice del brutal ajuste de Macri, sigue negándose a convocar a un paro activo con movilización para acabar con su plan de hambre y despidos.
La posición del peronismo respecto a hablar o no del aborto legal en las elecciones se manifestó en dicha reunión, entre otras cosas, en relación a las firmas. El Frente para la Victoria, por ejemplo, planteaba la recolección de firmas de diputados no individualmente, sino por bloques, en vez de juntar de mínima las 70 firmas con las que contamos el año anterior. De esa forma, pueden firmar el proyecto como bloques (la manera en la que se presentan sobre tablas) pero no garantizar su votación. Más preocupadas por si renovarían o no las bancadas, las radicales intervinieron en el mismo sentido. Sólo la izquierda y un sector de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto sostuvimos firmemente la posición en contra de las maniobras que pueden evitar que el proyecto se discuta. Mientras referentes del kirchnerismo, como la diputada Macha, insistían en que esto debían hacerlo para “cuidar a las diputadas verdes”, lo que se evidenciaba es que lo hacían para cuidar a los celestes: para garantizar que el movimiento no sepa cuántos como Manzur presentarán en sus listas.
Con la fuerza de la marea verde, exigimos que el aborto sea legal en 2019
En el fondo, la polémica es si ésta será simplemente una presentación testimonial o si el proyecto se va a tratar y aprobar en ambas Cámaras. Para que se escuche la voz de las mujeres, de la juventud y de la mayoría social que supimos conquistar con nuestra lucha, hace falta una concentración enorme y repleta de fuerza este próximo 28 de Mayo. Pero también hace falta que el derecho al aborto, y el reclamo de “niñas no madres” se visibilice en la campaña electoral. ¡Nada de esconder nuestros reclamos bajo la alfombra! ¡Los pañuelos no se bajan!
El hecho de que macristas, radicales y kirchneristas se nieguen a hablar del derecho al aborto en la campaña, no obedece a que haya “temas más importantes”, ya que tampoco hablan de echar al FMI, ni de impuestos extraordinarios a los millonarios para acabar con la desocupación y la pobreza. Lo único que demuestra es que hacen una campaña vaciada de programa, para ocultar que sólo quieren cambiar algo para que nada cambie! Las Rojas, y el Nuevo MAS preferimos la claridad: por eso, no sólo estaremos presentes, acompañando en las calles esta presentación. También lo haremos en el terreno electoral con nuestra compañera Manuela Castañeira planteando en la campaña electoral y en las calles la necesidad del derecho al aborto como parte clave de los derechos de las mujeres.
A las calles hasta que sea ley
Queda claro que las mujeres, y el feminismo en general, estamos para hacer historia. Venimos de un 8 de Marzo que, a pesar del cerco mediático y los intentos de casi todos los sectores de silenciarnos en el año electoral, fue extraordinario y masivo. La marea verde, lejos de haberse visto aplacada por la derrota táctica en Senadores, sigue encendida. De hecho, el año político no lo abrieron las elecciones, como Cambiemos, el peronismo y las burocracias sindicales pretendían: el año político lo abrió el movimiento feminista, lo abrieron las pibas y los pibes de los secundarios, lo abrió un mar de personas que, con el pañuelo verde en alto, clamaron por los derechos de las mujeres, trans y travestis; un duro golpe al gobierno reaccionario y ajustador de Macri. Esa es la fuerza que debemos llevar este 28 a la puerta del Congreso. Después de haber vivido lo que vivimos el año pasado, esta no puede ser “una presentación más”. Tiene que ser una convocatoria enorme que se plante contra el gobierno y todos los reaccionarios.¡A prepararla compañeres!