Trabajadores de Amazon y Starbucks en EE.UU. paran antes de Navidad

Histórica huelga de Amazon en Estados Unidos

Desde el jueves 19 de diciembre, miles trabajadores de Amazon en EE.UU. afiliados en el sindicato Teamsters se encuentran en la huelga más importante en la historia contra una de las mayores empresas del país, reclamando por contratos, salario y mejores condiciones laborales

Cerca de 10 mil trabajadores de Amazon, tanto conductores como trabajadores de los almacenes, han lanzado la que ya se conoce como la más importante huelga en la historia contra Amazon en Estados Unidos.

Los trabajadores reclaman por aumento de salarios y pago justo, por mejorar las condiciones de seguridad y las dramáticas y extenuantes condiciones de trabajo que enfrentan, así como por el reconocimiento de su sindicato firmando un contrato que les garantice derechos laborales.

La empresa del multi millonario Jeff Bezos es una de las más grandes del mundo y la más importante de comercio electrónico. Es famosa por su agresiva política anti sindical y su rechazo de cualquier tipo de negociación con los trabajadores y sus sindicatos.

Luego de semanas de preparación, los Teamsters le habían dado una fecha límite a Amazon: reconocer al sindicato y aceptar sentarse a negociar antes del 15 de diciembre o enfrentarse a huelgas. Amazon no dio ninguna respuesta. Es por eso que desde el 19 de este mes, comenzó la huelga en 5 estaciones de reparto y 2 centros de distribución en distintos puntos del país, a los que luego se sumaron otros almacenes y estaciones, en una huelga que crece, mientras también se impulsan acciones de protesta en cientos de otras instalaciones de la empresa.

El momento de la huelga es estratégico: los días previos a navidad son de “temporada alta” cuando la cantidad de entregas se dispara. Esto significa una intensificación brutal en la explotación de los trabajadores, quienes ven intensificados sus ritmos de trabajo, tanto dentro de los almacenes, donde deben preparar una cantidad interminable de paquetes, como para los conductores, que llenan sus camionetas y enfrentan jornadas extenuantes para cumplir con todas las entregas.

Muchos trabajadores se ven obligados a trabajar horas extra obligatorias. La temporada alta en Amazon además, significa un pico en la cantidad de accidentes laborales para los trabajadores. El aumento constante en el nivel de explotación es la marca de esta empresa, que se hace millonaria mientras sus empleados no llegan a fin de mes.

Amazon, empresa enemiga de la sindicalización

Amazon es mundialmente conocida por su política anti sindical, una enemiga total de los esfuerzos de organización de los trabajadores con todo tipo de ataques. Entre 2022 y 2023, Amazon gastó más de 17 millones de dólares en consultores especializados en evitar la sindicalización. La empresa es famosa por los millones que destina a tácticas como aprietes y todo tipo de medidas para impedir, demorar o adulterar las elecciones sindicales

El caso más claro es el de los trabajadores del almacén JFK8 en Staten Island, Nueva York, que luego de un inmenso y heroico proceso fundaron el Amazon Labor Union (ALU), lograron ganar la elección sindical en 2022 y conquistaron su certificación por la Junta Nacional de Relaciones Laborales (NLRB). Luego de años de luchas y maniobras por parte de la empresa, en junio de este año los trabajadores votaron incorporarse como local independiente al sindicato nacional de los Teamsters para potenciar sus recursos. Sin embargo, ninguna de estas medidas ha sido aceptada por Amazon, que sigue desconociendo ilegalmente el sindicato y negándose a negociar un contrato.

El sindicato de transportistas Teamsters, uno de los más poderosos y con mayor cantidad de afiliados en EE.UU., ya venía impulsando campañas de sindicalización de los conductores que trabajan para Amazon en todo el país. Luego de la incorporación de ALU, se han redoblado los esfuerzos de organización de quienes trabajan para Amazon.

Pero la modalidad de contratación de la empresa para sus envíos es parte de su política anti sindical. Al realizarla a través de subcontratistas, Amazon niega cualquier tipo de responsabilidad y desconoce que los trabajadores sean empleados de la compañía.

Desde ya, esto se trata de una estafa, como denuncian los propios trabajadores. La empresa niega que sean trabajadores de Amazon personas que usan chalecos de Amazon, manejan camionetas de Amazon para entregar productos de Amazon y bajo condiciones laborales impuestas por Amazon… Incluso hubo fallos de la NLRB expresando la responsabilidad de la empresa sobre esos trabajadores, pero la misma se niega a aceptarlos.

La huelga es importantísima en varios sentidos. No solamente por el efecto que tiene, al impactar en este momento de alta demanda, sino que también funciona como un aviso de los trabajadores, que no van a detenerse en la pelea contra este gigante.

Los trabajadores se levantan

El impacto de la huelga fue contundente. Durante días las acciones fueron creciendo en una importante demostración de fuerzas de la clase obrera, que marcan que esto solo está comenzando. El paro comenzó con 7 centros de envíos, 3 en el sur de California, y los otros 4 en Queens (Nueva York), Atlanta, San Francisco y Skokie (cerca de Chicago). A estos se sumaron también el mencionado JFK8 de Staten Island – Nueva York y la terminal de envíos aéreos más grande de la costa este en San Bernardino KSBD (California).

El lugar de mayores choques se dió en la estación de reparto DBK4 de Queens, Nueva York. En el primer día de la huelga, la policía atacó los piquetes deteniendo a dos trabajadores, acción que fue resistida por los trabajadores que lograron sostener la acción por largas horas y generaron demoras en los envíos. Pero no contenta con eso, dos días después la empresa desató una inundación sobre los trabajadores en huelga que hacían un piquete en la puerta de la fábrica. Estas acciones desmienten claramente la línea oficial de Amazon de que el paro no tendría “ningún efecto”

 

 

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Los trabajadores hicieron una gran demostración de fuerzas con los piquetes constantes y las acciones, que dieron enorme visibilidad e impacto a la huelga en todo el país. Además, también confluyeron con el Starbucks Workers United, el sindicato de la conocida cadena, que impulsó una huelga de 5 días, la más importante hasta el momento, luego de que la empresa no diera ningún paso en la firma de un contrato con el sindicato, a pesar de haberlo prometido a fines de febrero.

Ambos conflictos, Amazon y Starbucks, muestran nuevos sectores de la clase trabajadora que se organizan, en el marco del histórico proceso de re sindicalización y vuelta a escena de la lucha de los trabajadores que se vive en Estados Unidos. Se parte desde un piso bajo, pero las nuevas generaciones que ingresan a los lugares de trabajo muestran cada vez mayor impulso en sus luchas, conquistando nuevos sindicatos y protagonizando un renacer de los conflictos como no se veía hace muchísimo tiempo (como el “hot labor summer”/”verano sindical caliente” de mediados de 2023).

Pelean por el reconocimiento de sus sindicatos, contra las tácticas antisindicales de las empresas, que atacan la organización de los trabajadores y se niegan a negociar contratos. Pero ni los ataques de las empresas ni la victoria de Trump en las elecciones han puesto un freno al proceso, que por el contrario tiene una vitalidad enorme, como se expresa en estas huelgas de 5 días contra grandes corporaciones de la última semana.

Este es un proceso que no tiene vuelta atrás. Ante el capitalismo de este siglo XXI, que solo ofrece precarización, crisis y ninguna perspectiva de futuro, cada vez más los jóvenes trabajadores en EE.UU. se organizan por sus derechos. Sin dudas, hay importantes capítulos de esta pelea por delante.

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