Axel Vázquez era jefe de residentes en este hospital. Él mismo transformó su muerte en una terrible y desgarradora denuncia al sistema público de salud: los trabajadores en general, y los residentes en particular, son tratados como descartables. Sus condiciones de laborales y salarios de miseria los empujan a cubrir más y más horas de un trabajo extremadamente exigente.
El dolor recorrió a todos los presentes en el homenaje, junto a la denuncia de que nadie cuida a los que nos cuidan.
Su familia, sus compañeros y otros trabajadores allí presentes recordaron la enorme entrega de Axel, su calidez humana. Desde la corriente 18 de diciembre salud nos hicimos presentes. Acompañamos la indignación y el reclamo por condiciones dignas de trabajo y salario para todo el personal de salud. Exigimos a los gobiernos provincial y nacional terminar con la precarización laboral y ¡cuidar a los que nos cuidan!