
Basta de Chamuyo de café con el FMI y de reuniones secretas con Macri
La situación no se aguanta más. La plata no alcanza para nada, los pesos vuelan. Las paritarias parecen un lejano recuerdo y un chiste de mal gusto. A los docentes les siguen ofreciendo el 15%. La luz no para de subir, el gas es impagable, la SUBE siempre está vacía y el 1 de septiembre vuelven a escalar el bondi y las naftas.
La recesión viene durísima, cierres de empresas, los despidos y suspensiones son moneda corriente. A los estatales no les renuevan el contrato y, luego de años de trabajo, no les dan ni indemnización. Los trabajadores de TELAM hace 60 días que están de paro por la reincorporación de 357 trabajadores. Los colegios están sin gas, sin luz, sin agua… o directamente explotan, como pasó en Moreno, llevándose la vida de dos trabajadores. Los Hospitales, vaciados por la falta de presupuesto.
A los que aún conservan el puesto, las patronales les imponen una reforma laboral de hecho, con la vista gorda de los delegados y los gremios. Las nuevas condiciones de trabajo son de esclavitud. A toda una generación de trabajadores la están “rompiendo”. Les dejan el cuerpo a la miseria y después de romperlos los echan.
El Gobierno no para de ajustar y aplicar a rajatabla la receta del FMI. Macri dijo en marzo que la inflación anual no iba superar el 15%. En junio se comprometió con el FMI, y declaró que no iba a ser superior al 32%. Ahora ya se habla del 35%, y no es una locura que llegue al 40%.
La CGT se reunió con el FMI a tomar café, en el mismo momento que los obreros del Astillero Río Santiago enfrentaban la represión de la policía de Vidal. Ya se había reunido en secreto con Macri en Olivos a mediados de agosto, para seguir negociando sectorialmente: son uno sinvergüenzas totales. Todos los gremios cerraron por detrás de la inflación y en cómodas cuotas. En cuanto a revisión de la paritaria… “te la debo” dijo Triaca.
El “combativo” Moyano se fue de la CGT, pero no es muy distinto de los que se quedaron. Hace una medida de vez en cuando, pero no un verdadero plan de lucha para derrotar el plan de ajuste y hambre. Desde el 21 de febrero, cuando Moyano y sus aliados jugaron a las escondidas hasta el paro del 25 de junio hasta ahora, nada.
Hay que imponerles por abajo un paro de 36 hs con movilización ¡Que dejen la rosca y que se convoque ya a un paro activo!
El gobierno nos quiere robar el futuro y el de nuestras familias. Las Centrales Sindicales miran para otro lado. Ellos ya están en “la rosca” viendo como “jugar” en el 2019. Para nosotros no hay 2019, nuestra suerte y la de nuestras familias se juegan hoy.
No se puede seguir esperando mientras todos los días nos roban una parte de nuestro salario con la inflación.
¿Quién debe pagar la joda?
Cristina recibió coimas o “aportes de campaña” de la patria contratista. Vidal recibió aportes de gente que nunca aportó y de algunos que no tienen más que un miserable plan.
Los empresarios del Club de la obra pública se cartelizaban para decidir quién hacía la obra y cuánto se sobrefacturaba.
Nos hacen pagar los platos rotos de una fiesta a la que nadie nos invitó y de la que no vimos ni las migajas. Que la paguen los políticos patronales y los empresarios. Que se expropie a todos coimeros y a los patrones que participaron en las coimas y en la sobrefacturación.
¿Quién debe decidir?
Los multimedios solo ofrecen circo y quieren que nos conformemos con los cuadernos, haciendo campaña para que Cristina vaya presa. Así piensan ellos que Macri o Vidal podrán ganar las elecciones el año próximo. Escondiendo detrás de la corrupción ajena la propia, usándola de bomba de humo para distraernos del ajuste.
Los K no hacen olas y esperan que el ajuste haga suficiente daño como para que el gobierno pierda las elecciones y llegar a presentarse como la alternativa salvadora el año que viene. Pichetto y los gobernadores están en el barco del ajuste y están negociando los votos en el Congreso, pero no quieren quedar pegados a las malas noticias.
Todos esperan al 2019; pero nosotros, los trabajadores y el pueblo, no podemos esperar para comer, para no perder el trabajo, para pagar la luz, los remedios o las zapatillas de los pibes. Nadie votó el ajuste: el PRO les mintió y estafó a millones. Los trabajadores y el pueblo, es decir, la inmensa mayoría de la población, tiene derecho a decir sobre los destinos del país y de nuestras vidas y no el “mejor equipo de los últimos 50 años” ¡Que los trabajadores y el pueblo hagan escuchar su voz en las calles!
¡Que la CGT llame al paro general de 36 hs con movilización a la Plaza de mayo ya!
Aumento de emergencia del 30% a activos y jubilados indexado mensualmente
No al presupuesto del ajuste del FMI, Macri y los gobernadores
Basta de aumentar los ritmos de trabajo.
No a la reforma laboral de hecho.
Prohibición por ley de despidos y suspensiones
Expropiación de toda empresa que cierre o despida






