La actual conducción, en manos de agrupaciones del peronismo (La Cámpora, Megafón, La Mella), perdió un importante porcentaje de votos en relación a la elección del 2022. Su lista se llamó “Malvinas Argentinas”, cambiándose el nombre y el logo para la ocasión. Pero el cambio no alcanzó para lavarles la cara después de años de vaciar el Centro de Estudiantes, de ausentarse de la Universidad en tiempos de gobierno de ultraderecha, y de seguir sin chistar cada una de las determinaciones de una gestión universitaria altamente hostil a la organización estudiantil.
Mientras tanto, el ¡Ya Basta! viene llevando adelante una experiencia de construcción de espacios de organización estudiantil, presentes, abiertos y participativos.
Ver esta publicación en Instagram
Con unos meses de esa experiencia y apenas después de la pandemia, en el 2022, estuvimos a solo 7 votos de ganar el CEdHA. Desde entonces, y durante estos dos años, redoblamos la apuesta. Militando todos los días y en todos los turnos, construyendo y dando la pelea por un espacio físico para las secretarías independientes que habíamos conquistado, con reuniones abiertas, carteleadas, muraleadas, festivales Unlapalooza estallados de estudiantes, y muchísimas iniciativas más. Construimos un lugar de encuentro para salir hacia las movilizaciones, un espacio para expresarse y también para acercar cada uno de los reclamos cotidianos de les estudiantes.
La UNLa es una Universidad que tiene innumerables espacios privilegiados en relación a otras universidades públicas. Espacios valiosísimos para la formación de les estudiantes: un cine, un estudio de grabación, laboratorios, equipamiento técnico de todo tipo, talleres de diseño industrial, impresoras 3D, y más. Pero la Universidad tiene también una gestión muy dura, muchas veces hostil con les estudiantes. A estos espacios les estudiantes acceden poco, o incluso nada. Las autoridades deciden a puertas cerradas qué uso se le da a esos espacios, qué insumos se compran, en qué se desinvierte.
Ver esta publicación en Instagram
Además, es una gestión muy hostil a la organización estudiantil en particular. En la UNLa te cruzás con docentes e incluso con estudiantes que sienten miedo (sí, miedo) de posicionarse respecto a ciertos debates. Por ejemplo, en Diseño Industrial, se tomó la decisión inconsulta y de un día para el otro de mudar la carrera a otro predio, y a les estudiantes que alzaron la voz exigiendo poder opinar al respecto se los intimidó y amedrentó. El año pasado, en 2023, las autoridades robaron un fichero y una mesa del ¡Ya Basta! con todos los materiales de militancia, durante un fin de semana largo y con la Universidad cerrada. Este año se repitieron una y otra vez las amenazas de prohibir colgar carteles en el principal edificio de la UNLa, y donde cursan la mayoría de les estudiantes del departamento de Humanidades y Artes.
Sin ir más lejos, durante estas semanas de campaña, sucedieron dos episodios gravísimos de amedrentamiento contra el ¡Ya Basta!: el ingreso de personas ajenas a la Universidad, encapuchadas y que se negaron a identificarse, corriendo y arrancando nuestros carteles. Los episodios se dieron, uno a primera hora de la mañana y el otro a última hora de la noche, sin que el personal de mantenimiento o de seguridad de la Universidad hiciera nada para impedirlos. Al día de hoy, ninguna de las otras listas ni la gestión de la UNLa se pronunciaron al respecto.
Es claro que en toda la UNLa, y en el departamento de Humanidades y Artes en particular, les estudiantes expresan una enorme necesidad de nuevas formas de representación, de nuevos Centros de Estudiantes. Una necesidad de espacios de organización acorde al momento político que atravesamos, a la altura de los ataques del gobierno de Milei y de lo que implica hoy la defensa de la educación pública. Pero también, una necesidad de Centros de Estudiantes que estén presentes, que estén al servicio de la resolución de las necesidades y problemas inmediatos y particulares de la Universidad, que son muchos. Se viene haciendo cada vez más clara la necesidad de hacer la UNLa más de les estudiantes, de sentir más propia la Universidad para poder defenderla.
Por otro lado, el PTS…
La agrupación del PTS en la UNLa (que se llama Frente de Estudiantes de Izquierda, FEI, a pesar de ser una sola agrupación), tuvo una actitud muy característica de esta corriente. Desde el ¡Ya Basta! les hicimos una propuesta para la construcción de listas unitarias en los 4 Centros de Estudiantes y también para el Consejo Superior. Una propuesta que era paritaria en lo global, y que nos abría la posibilidad de conquistar no solo uno, sino dos centros de estudiantes y, además, representaciones significativas en los otros dos y consejeros superiores. Sin embargo, siguiendo sus propios intereses, rechazaron esta propuesta sin mayores explicaciones, y nuevamente, como hace 2 años atrás, pero esta vez sin “éxito”, se dedicaron a militar contra el ¡Ya Basta! Fue tan rotundo su acuerdo con el peronismo que fue imposible encontrar en boca de sus militantes alguna crítica al Centro de Estudiantes…
Los desafíos del Nuevo CEdHA: La imaginación al poder
A pesar de haberse presentado la izquierda dividida, a pesar de los aparatos del peronismo, a pesar de la política cloacal, a pesar de la gestión tan agresiva y de los encapuchados que irrumpieron a arrancarnos carteles… A pesar y contra todo eso, el ¡Ya Basta!, con una lista hermosa llena de pibes y pibas de todas las carreras, con mucha fuerza, mucho laburo y mucha militancia, ganó la elección y conquistó un Centro que es para todes les estudiantes. Con una campaña desde abajo, muy sentida y creativa, llevamos, en alguna medida, “la imaginación (y los carpinchos) al poder”. Ganamos un Nuevo CEdHA, ganamos la oportunidad de construir un Centro de Estudiantes que esté presente, que sea refugio, espacio de organización y herramienta de lucha contra este gobierno que ataca la educación y la Universidad pública. Ganamos una oportunidad que se celebra hoy en las cursadas, en los pasillos de la UNLa, en los mensajes y en las redes del ¡Ya Basta!, con muchísimos estudiantes festejando, felicitándonos, acercando ideas, queriendo ser parte de este nuevo CEdHA que recién comienza a ser.
Y con esa oportunidad viene un enorme desafío. El desafío de construir un Centro presente, con un espacio físico propio, gestionado por les estudiantes. Un Centro que sume a la UNLa al Estudiantazo. Un Centro solidario con cada lucha de les trabajadores y con cada reclamo de les estudiantes. Un Centro que abra los espacios al conjunto, para nuclear y organizar a todes les estudiantes que quieran enfrentar a Milei, defender la educación pública, luchar por las prácticas o por la democratización de la Universidad. Y aunque sea un desafío enorme, no mentimos cuando en campaña dijimos una y otra vez que “tenemos con qué”. El ¡Ya Basta! es una agrupación que no para de crecer, con pibes y pibas con muchísimas ganas, con creatividad que desborda, y con muchísimo futuro.
Ganamos un Nuevo CEdHA para les estudiantes. Ahora, manos a la obra.