Día a día, los informes oficiales del gobierno arrojan cifras más y más alarmantes pero no atinan a dar ni un sólo paso fuera del plan de flexibilizar toda medida sanitaria. El día de ayer se registraron 187 muertes en 24 horas. El índice de letalidad se sos tiene en un 2% sobre casos confirmados y la tasa de mortalidad por cada millón de habitantes es de 144.

Los informes indican también que hay ahora 1832 internados en terapia intensiva, con una ocupación de camas en el país en torno al 58.6% a nivel nacional y 68,7% en AMBA. El 76,6% de los paciente en terapia intensiva se encuentran en la Ciudad y Provincia de Buenos Aires, 4,6% en Córdoba y 3,9% en Mendoza.

Precisamente el 79% del pico de contagios de ayer corresponden a la Ciudad y Provincia de Buenos Aires. Los contagios son un indicador de lo parecido que está siendo la «fase tres de la cuarentena» a ninguna cuarentena en absoluto sino más bien a una sistema de control del uso del transporte público.

El 20% restante de los casos es sin embargo una proporción creciente para otras provincias, que tienen su propia circulación comunitaria.

23 de los muertos registrados tenían residencia en la provincia de Buenos Aires, 12 en Jujuy, 5 en la Ciudad de Buenos Aires, 2 en Chaco, 3 en Mendoza, 2 en Neuquén, 1 en Chubut, 1 en Entre Ríos y 1 en Salta.