Por Miguel Ángel Contreras
Último momento. Viéndose derrotados en los debates de base estudiantiles que resolvieron el día de ayer tomar la facultad de Arquitectura de la UNC de cara a la marcha nacional educativa del 30, los K y la Franja Morada recurrieron a métodos de patota. No sería casualidad: ambos quieren que las cosas vayan tranquilas hacia las elecciones del 2019, aunque vayan luego en listas distintas. En el medio, pasa el ajuste macrista.
En la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño Industrial hubo una importante asamblea autoconvocada, ayer a las 17 hs. El kirchnerismo, la conducción del centro de estudiantes, se había negado a convocar la asamblea. Las y los estudiantes plantearon la necesidad de profundizar los métodos de lucha y que era necesario tomar la facultad, para dar su apoyo al resto de los pabellones tomados, a la lucha docente y también expandir al resto de la comunidad educativa sus reivindicaciones. Arquitectura es una de las carreras más caras y exigentes de la UNC, con una importante y desigual carga horaria; las estudiantes y trabajadoras que tienen hijos explicaban lo difícil, casi imposible, que es para ellas cursar, cumplir con los plazos y trabajos de entrega que muchas veces las atrasan o dejan fuera de la carrera universitaria.
En dicha asamblea se votó y aprobó la toma, lo cual alertó a la Franja Morada (dirección de la FUC) y al Módulo (los K), que actuando mancomunadamente y con velocidad, se presentaron con todo su aparato militante para boicotear la legitimidad de la asamblea y la decisión tomada. Durante 6 horas de debate, se sumaron todos los estudiantes de arquitectura, que salían de cursar y llegó el apoyo del activismo del resto de las asambleas, facultades tomadas y también de trabajadores de EPEC que se hicieron presentes e intervinieron. Se gestó ante los ojos de todos, una imagen que nos recordó al Cordobazo. Ya cerca de la una de la mañana, derrotada la maniobra de la Franja y el Módulo, que querían expulsar al resto de los estudiantes, ellos mismos decidieron irse al verse derrotados. De este modo, las y los estudiantes de FAUD procedieron a reafirmar la toma y continuar con la lucha.
Esta pelea que se dió en paralelo con el estudiantiantado de la Facultad de Derecho y demostró que se le puede torcer el brazo a la burocracia estudiantil, sea del color que sea. Los estudiantes estamos convencidos de que hay que dar la pelea hasta el final contra el ajuste y el desfinanciamiento a la educación pública del gobierno de Mauricio Macri.
