
La Negra tiene que defender a Facundo Diaz y llamar a un plan de lucha nacional contra los despidos y la flexibilización laboral.
La conciliación obligatoria por el despido de Facundo Díaz termino la semana pasada. La terminaron con la fábrica cerrada por vacaciones. El gobierno se amparó en la finalización de los plazos legales, ¡pero claramente había herramientas para apretar a la patronal para que salga una conciliación voluntaria! Pero en ningún momento fue esta su actitud. Todo el tiempo buscó desgastar, jugando a favor de la patronal. A pesar de esto Facundo se presentó hoy a trabajar, donde en primera instancia lo dejaron entrar, pero luego le pidieron que se retire con el personal de recursos humanos y de la seguridad policial. Una muestra más de la total intransigencia de la empresa, apoyada por el Ministerio.
La dirección del sindicato nuevamente dio una muestra más de vergüenza y pasividad ante estos hechos, en todos estos meses no organizo a la delegación para luchar.
La negra nacional después del conflicto dejó hacer a las empresas, primero fue el despido de Díaz en Córdoba, después los aprietes y las suspensiones en Buenos Aires hasta que llegaron los despidos también en Bridgestone y en Fate.
En vez de “luchar unidos y organizados” se hizo al revés. Se dividió y desorganizó.
La lucha contra las patronales es una sola.
Exigimos un plan de lucha nacional cuando termine la conciliación que se les diga a los compañeros que no agarren el despido, que se haga un fondo de lucha para bancar a los despedidos.
Dejar pasar estos despidos es dejar pasar la reforma laboral de hecho: mayor flexibilización, más polivalentes, trabajo continuo, más esfuerzo, más enfermedades, menos salud y menos plata.
Desde la marrón seguiremos acompañando a cada uno de los compañeros despedidos.
La negra tiene la palabra.
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