
Mediante un decreto, el Banco Central anunció que las empresas que fueron beneficiadas por el «dólar soja» no podrán comprar dólares. El director del BCRA, Agustín D’Atellis, se refirió a las presiones devaluatorias de los empresarios del agronegocio que comercializan soja, que vendieron a $200 y luego se dolarizaron.
“(…) Los agentes económicos que hayan vendido soja en el marco del Programa de Incremento Exportador no podrán acceder al mercado de cambios para compras de moneda extranjera ni tampoco realizar operaciones con títulos y valores con liquidación en moneda extranjera”, dice el anuncio. El PIE fue para disponer de un tipo de cambio especial para los sojeros, de $200, para que se liquidaran las exportaciones entre el 6 y 30 de septiembre.
Para poder pagar el ‘dólar soja’, el gobierno está emitiendo moneda, lo que genera inflación. Por lo tanto, los exportadores quieren desprenderse de los pesos que les quedan por el dólar soja.
Los ricos nunca pierden
Esta medida pone en peligro el fin del programa que tiene como objetivo engrosar las reservas internacionales del Banco Central. Después que la Sociedad Rural y amigos pusieran el grito en el cielo sobre una estafa del kirchnerismo de la mano de Sergio Massa, desde el BCRA salieron a aclarar que el límite para acceder a dólares es para las empresas.
La aclaración del oficialismo es innecesaria porque la capacidad de acceder a dólares limitada no es total. El objetivo es que no se dispare la cotización del contado con liquidación por el dólar soja. Es decir, es un límite parcial. Pueden seguir comprando sus dólares en tanto «personas físicas» pero no como empresas.
Hasta ayer lunes 19 de Septiembre se liquidaron unos $s313,4 millones, ya se habían totalizado u$s3.880 millones en lo que va del mes, quedando muy cerca del objetivo de u$s5.000 millones planteado al principio.