Liberan todo menos los salarios

Caputo se niega a homologar paritarias, la UTA y Camioneros posponen las medidas

Caputo sostiene la postura de no homologar las paritarias que se firmen por encima de la inflación que esperan para los próximos meses. El Estado interviene activamente en aplastar los salarios, mientras todos los demás precios de la economía se encuentran liberados y aumentan sin control.

La política del gobierno con las paritarias resuena especialmente en dos gremios de peso, la UTA (transporte) y Camioneros, ambos sectores con acuerdos paritarios ya alcanzados pero que la Secretaría de Trabajo se niega a firmar. A pesar de esta burda provocación, la burocracia sindical sigue estirando la situación y pospuso los paros que se esperaban para este lunes.

El domingo, el líder del sindicato de Camioneros, Pablo Moyano, ya había adelantado que irían a un paro de 48hs. si el gobierno continuaba con su negativa. Sin embargo, esgrimiendo argumentos legales a pesar de su retórica incendiaria, finalmente Moyano confirmó que «le darían hasta el jueves para que se haga efectivo el aumento». Por ahora, el gobierno parece firme en su decisión de no homologar, por lo que es probable que para el próximo fin de semana la dirigencia sindical no tenga más opción que ir al paro.

Camioneros ya tiene una paritaria acordada con dos de las tres cámaras empresariales del sector. El acuerdo prevé un 25% de aumento para los sueldos de marzo y otro 20% para los de abril. Para Caputo, la «libertad económica» sólo es aceptable siempre y cuando pierdan los trabajadores. Si alguno quiere no ganar sino recuperar apenas una parte de todo lo perdido, ahí los «liberales» se vuelven fanáticos del «intervencionismo estatal».

La situación de la Unión Tranviaria Automotor (UTA, choferes de colectivos) no es muy distinta. También este gremio denuncia que las cámaras empresarias, con la venia del gobierno, incumplen el acuerdo paritario. La conducción del gremio había lanzado un llamado a la huelga para este lunes, pero finalmente no se concretó y las partes tendrá una nueva reunión recién el miércoles, por lo que las amenazas de paro también se posponen al día jueves. El sindicato justificó esta decisión amparándose en «procurar la paz social».

Estos dos gremios de mucho peso serán apenas la punta de lanza de una ofensiva más generalizada del gobierno contra los trabajadores, apostando a aplastar el salario mientras pasa un ajuste feroz.

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