Desde el día de ayer en las escuelas de CABA recorren la bronca y la indignación ante el aviso del Ministerio de Educación en el que se informa que el descuento por presentismo pasará del 2% al 4% del salario neto.
En un comunicado cínico en el que se declara que «están convencidos del rol transformador de los docentes» y que quieren «incentivar la asistencia diaria», el Ministerio a cargo de Soledad Acuña anuncia un nuevo ataque a la docencia.
En el acta que las direcciones sindicales traidoras de todos los sindicatos porteños, a excepción de Ademys, firmaron en la Mesa Salarial del 12 de Octubre se establece un aumento considerable en el Decreto 483 «desachatando» la escala salarial, de todos modos sobre la base de la devaluación de los salarios docentes iniciales y otorgando un mayor peso al adicional por presentismo es decir se aumenta un 100% el descuento por presentismo de una vez. De esta manera, ahora un docente que se enferma o que ejerce su legítimo derecho al paro sufrirá un descuento del 4% de su salario neto por presentismo.
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De fondo, lo que esconde este nuevo ataque es el intento de un disciplinamiento mayor a la docencia, es decir, que les docentes no pensemos ni por un segundo en la posibilidad de hacer un paro, ya que el descuento sería considerable, esa es la cuestión de fondo, en eso hay que ser claros, de lo que está convencido el gobierno de Larreta y Acuña es de llevar a fondo este intento de disciplinamiento, para que no reclamemos por condiciones laborales, por la situación de las escuelas, por las viandas de nuestros pibes, por los reclamos de la comunidad educativa. De fondo lo que quieren prohibir con esto es el derecho LEGÍTIMO a la protesta, esto no puede pasar, es inadmisible.
En este sentido rechazamos esta medida del gobierno ya que es parte de su plan de ajuste sistemático en la educación, que incluye golpes al salario docente y a sus condiciones de trabajo, así como un ataque al derecho a la protesta. Repudiamos su política de demonización y de ataque continuo a la docencia. Y exigimos a UTE como gremio mayoritario en la capital que rechace esta repugnante medida, y organicemos asambleas en las escuelas de toda la docencia para canalizar esta bronca y derrotar este plan de ajuste y disciplinamiento.