
El pasado jueves 23 desde el comité de Jóvenes Trabajadores Precarizados pusimos en pie la primera parada solidaria de repartidores en la ciudad de buenos aires. Desde las 18hs hasta pasadas las 21hs, con lluvia intermitente pero mucha energía, pusimos a disposición café, té, cargador de celular, insumos de sanitización y asistencia técnica a los repartidores reunidos en la plaza. No ajenos al aumento de casos de Covid, hicimos todo esto respetando el distanciamiento social y con medidas de higiene.
En la última asamblea de trabajadores de reparto de AMBA logramos la aprobación de nuestra moción para poner en pie las paradas solidarias. Con esa fuerza nos empezamos a organizar para que se hagan realidad. Fue una actividad impulsada por repartidores con el propósito de tender una mano solidaria, y sobre todo generar un espacio de intercambio y discusión.
Las paradas solidarias nacen de la observación misma de la realidad de los repartidores: se juntan en esquinas, plazas o lugares por el estilo. Y la realidad es que cuando uno está repartiendo y tiene un inconveniente, sabe que la persona mejor capacitada y dispuesta para tenderle una mano es otro repartidor. Por encima del emprendedurismo individualista que las empresas quieren instalar, lo que prima es la solidaridad entre pares.
La recepción de los repartidores que fueron pasando por la parada fue excelente. Los temas de conversación giraron en torno a las bajas tarifas, la irresponsabilidad de las empresas de reparto con los que todos los días estamos en la calle y las dificultades cotidianas que enfrentamos. Aprovechamos para invitarlos al plenario nacional de la Corriente Sindical 18 de Diciembre que se realizó el sábado 25, donde nuestro compañero Nico habló en representación de JTP y los repartidores.
La realidad que nos toca vivir es que en pandemia somos esenciales pero eso no se ve reflejado en nuestras condiciones de trabajo ni en la remuneración que recibimos. Los repartidores enfrentamos la pandemia y la crisis económica sin ningún respaldo o contención de parte de quienes se llenan los bolsillos con nuestro trabajo, las apps. No nos dan insumos de higiene, no nos cubren si tenemos un accidente
Frente a la legislatura porteña quedó claro que sindicatos como ASSiM no representan a los trabajadores de reparto por aplicación, mandando sus patoteros a golpear a los que nos movilizábamos contra la ley de Larreta. También vimos como los partidos tradicionales votaron leyes contra nosotros sin oír nuestra voz. A través de la puesta en pie de las paradas, queremos construir un nuevo sindicato desde abajo, democrático y de lucha, para que se escuchen bien fuerte los reclamos de los trabajadores de reparto.
Esta primera experiencia nos empezó a demostrar el potencial de las paradas como iniciativa. A la hora de organizar trabajadores, es indispensable generar espacios de intercambio. De otro modo, cualquier agrupación que intervenga en el sector corre el riesgo de sustituir la experiencia real de los repartidores por lo que esa agrupación supone que es lo mejor.
Este jueves vamos a seguir bancando la parada en Serrano, profundizando la experiencia y replicándola en más lugares. Es el caso del comité de JTP de zona norte que organiza su parada en Villa Ballester, el comité de zona sur que hace lo mismo en Lomas de Zamora, o también los compañeros de La Plata, prontos a iniciar una experiencia. Tenemos la oportunidad de intervenir en el movimiento de repartidores en sus momentos fundantes, y creemos que las paradas son la herramienta necesaria para reunir al activismo y avanzar en organización.
¡Sumate a bancar la parada!