El pasado 3 de octubre, en su informe de gestión ante la Cámara de Diputados, Marcos Peña confirmó lo que ya era obvio hace meses: la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) le quitará a la UNSAM 1,2 hectáreas de su campus. La supuesta razón para este robo por parte del Estado Nacional a la universidad se debe a que la concesionaria de los trenes de cargas del Ferrocarril Mitre, Nuevo Central Argentino (NCA), necesita una playa ferroviaria para realizar diferentes tareas logísticas. Además, Peña señala la “ilegalidad de la ocupación del predio por parte de la universidad, falta de uso específico, indebido y estado de innecesaridad”.
Más allá de los tecnicismos legales, lo legal no necesariamente es lo legítimo, el robo de este terreno se da pocos días después de darse a conocer el segundo acuerdo del gobierno de Macri con el FMI y en medio de un gran ajuste. Este claro ataque por parte del Gobierno Nacional viene de la mano de la política de ajuste del FMI contra la educación pública y es un precedente de que pueden avanzar contra toda la comunidad educativa.
Pero esto no es una novedad. Y, como Peña aclara, estas “negociaciones” con la universidad se vienen manteniendo desde el 2017. Resulta más que clara la complicidad del rector, Greco, que, además de participar en las negociaciones, había difundido un comunicado el 1° de septiembre pasado anunciando la suspensión de la quita de los terrenos cuando esto no era realmente así. Además, aún no ha respondido a las constantes peticiones de los estudiantes para aclarar la situación del terreno en cuestión.
Tampoco se puede dejar pasar que los consejeros estudiantiles de Somos UNSAM y La Red sabían hace meses de estas negociaciones (estos últimos hasta participaron de ellas) y no informaron de nada de lo que sucedía, siendo cómplices del rectorado se sumaron a las mentiras del Greco y vaciaron asambleas para desmovilizar.
Entre el ajuste y los negociados
El CEO de gabinete, Marcos Peña, explica que el robo de la hectárea es necesario para el “desarrollo ferroviario” que están impulsando en el país. Pero esto, obviamente, no es así. Veamos de qué se trata.
Peña aclara en su informe que la hectárea será utilizada por NCA para tareas logísticas indispensables para la explotación de los trenes de carga del Ferrocarril Mitre. Pero esto ya lo realizaba previamente en otros dos predios. Uno en Retiro y otro en Colegiales. ¿Qué sucedió con estos terrenos?
La venta de terrenos ferroviarios surgió hace dos años. En noviembre del 2016, el gobierno publicó en el Boletín Oficial el decreto n°1173/2016 que autorizaba la venta de los terrenos ferroviarios más codiciados para negocios inmobiliarios. Desde Mendoza hasta Colegiales y Retiro. En estas operaciones participaron las firmas inmobiliarias más grandes del país, en una de las cuales, el Grupo Monarca, era parte el imputado Marcelo Orfila hasta el 2015, para luego presidir hasta hoy Trenes Argentinos.
En estas operaciones se perdieron trazas de gran importancia, como Empalme Norte, única conexión entre los seis ferrocarriles en la ciudad y con acceso directo al puerto de Buenos Aires. Como justificativo de tan grandes pérdidas en terrenos ferroviarios, el gobierno “aclaró” que el fondo obtenido por las ventas serían destinados para financiar la obras de los viaductos de la línea Mitre y San Martin. Aunque después, en agosto de este año, la legislatura aprobó el endeudamiento del Ejecutivo por 100 millones de dólares.
Luego, en octubre del año pasado, el Ejecutivo Porteño aprobó un proyecto en la legislatura que permitiría vender para negocios inmobiliarios el playón de Colegiales, sin ninguna aclaración de como impactaría esto positivamente en el “desarrollo ferroviario” del Ferrocarril Mitre. Predio que, dicho sea de paso, es seis veces más grande que el de la UNSAM. Si esto no sucedió todavía fue por los vecinos del barrio que están en contra de la construcción de torres y exigen ahí un parque, ya que Colegiales es unos de los barrios con menos espacios verdes de la ciudad. Los Vecinos Autoconvocados de Colegiales, que sostienen este reclamo contra los negociados, estuvieron presentes en las asambleas interclaustros de agosto pasado en la UNSAM, apoyando la lucha y rebelión estudiantil.
En cuanto a la playa ferroviaria de Retiro, esta fue desafectada por el nuevo tramo de la autopista Ilia, que ya está presentando conflictos con los vecinos de la Villa 31. El trazado en cuestión pasa por encima de las casas de los vecinos, por lo que Larreta quiere desalojarlos.
Con la desafectación de estos dos predios, la concesionaria NCA se quedó sin lugar donde realizar sus operaciones ferroviarias. Entonces no parecía importar mucho el desarrollo ferroviario
El kirchnerismo es cómplice
En la última asamblea realizada el pasado jueves, se votó por la toma del rectorado hasta que Greco aclare la cuestión de los terrenos. Y además, se inició un acampe en la zona afectada. La asamblea fue convocada con urgencia por los sectores de izquierda y ante la pasividad de los sectores kirchneristas, que ya desde asambleas pasadas intentan aplacar la rebelion educativa y depositar la confianza en el rector.
Los estudiantes mostraron repudio por las direcciones peronistas de los centros de estudiantes a quien acusan de complicidad y a la burocracia estudiantil por vaciar pasadas asambleas. Sin dudas estás son las mayores trabas con las que se encuentran el movimiento universitario en el conurbano bonaerense, sectores que quieren canalizar el ajuste hacia 2019 mientras se reduce el margen de los estudiantes, víctimas de todo el ajuste macrista.
No a la quita de terrenos de la UNSAM
La educación publica se defiende
Ya Basta – Las Rojas UNSAM
