
Los trabajadores y el pueblo la estamos pasando mal y la cosa se viene peor. El gas, la luz y el agua se han convertido en artículos de lujo, no en un derecho humano elemental que debe garantizar el Estado. Nuestro salario devaluado no alcanza para nada.
En este marco hoy se discutiría en senado el presupuesto para el año 2019. El presupuesto es el cálculo de los ingresos y egresos del país. Todo el presupuesto está pensado para que sobre la mayor plata posible para pagar los intereses de la deuda, así de sencillo. Entonces se recortan las partidas para salud, para los jubilados, para la educación, para los discapacitados, las inversiones públicas, la obra pública, los sueldos de los estales, todos los subsidios al agua, la luz, el gas, el transporte , etc., etc.
Los mineros de Río Turbio que exigen poner en funcionamiento la usina a carbón para darle continuidad a las fuentes de trabajo. Para eso no hay plata.
Para comprar los insumos necesarios para terminar los trabajos del Astillero Río Santiago… para eso tampoco hay plata. Y así podemos poner miles de ejemplos.
El presupuesto de Macri, los gobernadores y el FMI, es un presupuesto de genocidio social; condena al hambre y a la desocupación a la inmensa mayoría del pueblo. Es un presupuesto donde primero se paga la deuda y luego se ve para qué alcanza el resto. A eso le llaman de déficit cero.
¿Déficit fiscal o saqueo descarado?
El gobierno tomó deuda en los últimos tres años por una cifra que se calcula cercana a los 150.000 millones de dólares. ¿Se tomó deuda para hacer fábricas, para hacer escuela y hospitales?, ¿para mejorar la infraestructura? , ¿para hacer usinas? No. Nada de eso. El gobierno tomó deuda para que ellos puedan viajar por el mundo. Se calcula en cerca de 10.000 millones de dólares lo que algunos argentinos gastaron en turismo en el exterior y que se financió con deuda pública.
El déficit del sector automotriz es de otros 10.000 millones de dólares. Es decir se tomó deuda por esa cifra para que los ricachones, los padres, los primos y los amigos de Macri compren autazos importados.
Para pagar las lebacs con que los amigos de Macri hicieron fortunas también se pidieron otros miles de millones. Para que las empresas extranjeras puedan remitir remesas a sus casas matrices, también se pidieron miles de millones de dólares. Para que los millonarios atesoren y compren hasta 2 millones de dólares por mes libremente, también se pidieron miles de millones de dólares. Y así llegamos a esta terrible deuda externa. El gobierno de los ricos para los ricos saqueó el país y ahora quiere que los trabajadores y el pueblo paguemos su fiesta.
¿Ellos o nosotros?
Este gobierno de empresarios para empresarios no tiene límites, pretendía sacarnos las friolera de 17.000 millones de pesos en 24 cuotas a todos los trabajadores y el pueblo para compensar a los “pobres empresario del sector gasífero” que perdieron con la devaluación.
Como era tan escandaloso, dio marcha atrás, pero media marcha atrás. Porque no anuló la medida de compensar a los “pobres empresarios”, sólo que ahora en vez de compensarlos con la boleta de cada uno de nosotros, lo compensan con el presupuesto. El Estado le reconoce a las empresas la perdida por la devaluación, pero en vez de sacarnos la plata directamente de nuestro bolsillo hacia el del empresario, ahora proponen que la plata salga de nuestro bolsillo hacia el presupuesto y de ahí al empresario. ¿Por qué no nos reconoce a los trabajadores la devaluación? A los docentes de la provincia de Buenos Aires María “Heidy” Vidal les dio por decreto el 20% de aumento y cerró la paritaria y la revisión, mientras que el mismo gobierno a las empresas le reconoce el 100% de la devaluación. Aunque este beneficio para los empresarios acrecienta el déficit fiscal, en este caso no importa por que se la llevan ellos.
Esta gente son cómplices del ajuste
El “hay 2019” o el “al gobierno lo derrotamos en las urnas” etc. son todas manera de decir que van a dejar que pase el presupuesto del genocidio social.
Toda la dirigencia tradicional – peronismo, kirchnerismo, CGT, CTA, ninguno convocó a movilizar hoy- se ampara en la gobernabilidad para no hacer nada, o mejor dicho, hacen que hacen pero realmente no hacen nada serio para derrotar al gobierno del ajuste permanente.
La gobernabilidad no es una cuestión abstracta, el gobierno de Macri estafó a la población, prometió un cambio para mejor, prometió sacar el impuesto a las ganancias de la 4º categoría, por ejemplo. Prometió que no iba haber tarifazos, ni despidos, etc., etc… y desde que asumió está atacando a los trabajadores. Es un verdadero escándalo que el plan de gobierno se discuta en Washington con el FMI. ¿Acaso esto no afecta la gobernabilidad? ¿Quién votó a Lagarde? Si el gobierno estuviera preocupado por la gobernabilidad ¿por qué no da un aumento de emergencia del 30% para todos?
Jugar a la gobernabilidad es jugar para Macri, y Macri ya demostró claramente de qué lado está, con quién está y para quien juega.
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