La batalla oscurantista de Milei 

En Davos, Milei resumió los ejes de la “batalla cultural” de la extrema derecha mundial: enfrentar la “agenda asesina del aborto”, acusar de abusadores y pedófilos a las personas LGBT+, negar los femicidios y las personas trans y no binarias. Ese es el discurso que funcionarios y usinas ideológicas del gobierno -desde Patricia Bullrich y Lemoine hasta Agustín Laje y Nicolás Márquez junto a los “Varones Unidos”- levantan como bandera. El feminismo y la supuesta ideología de género son sus enemigos ideológicos declarados, casi tanto como el anticapitalismo.

Pero sus discursos patriarcales y oscurantistas no se quedan en la esfera de las ideas. Ya lo han dicho: quieren eliminar la figura del femicidio y trans-travesticidio tanto como la Ley de Identidad de Género. Quieren volver a encerrar a las mujeres en el único rol de procreadoras y responsables del trabajo doméstico. Quieren devolver la diversidad al clóset. Las iglesias evangélicas son parte de la batalla y han lanzado una campaña por la derogación de la Ley del Aborto Legal, Seguro y Gratuito. Estos discursos tienen consecuencias concretas sobre nosotres. Como la limitación de tratamientos para hormonización. La falta mi misoprostol y mifepristona, la instalación de militantes anti aborto en los consultorios. El triple femicidio de Brenda, Morena y Lara, el femicidio de Luna Giardina perpetrado por Laurta amigo de Laje y Marquez, el doble femicidio de Luna y Mariel en Córdoba, el femicidio de Matilda López Sanzetenea y el trans-travesticidio de Sofía Fernández, entre tantos otros. Milei es el responsable ideológico de estos crímenes.

El capitalismo es genocidio, cambio climático, esclavitud laboral y familia patriarcal

No es casualidad que los negadores del cambio climático y defensores del genocidio en Palestina sean también los que odian las luchas de las mujeres y diversidades. Un sistema basado en la explotación, en el que los saqueadores de riquezas se transforman en dueños del mundo, no puede ir para otro lado. En su constante búsqueda de maximizar sus ganancias, arrasan con la naturaleza y la humanidad.

Es por eso que van por la reforma laboral: máxima ganancia para los empresarios que viven del trabajo ajeno, máxima precarización para los que vivimos de nuestro trabajo. Acabar con la jornada de 8 horas (y el pago de horas extras), y esconder la relación de explotación (¡bajo el eufemismo de ser tu propio jefe buscan evitar el pago por licencias por enfermedad, accidentes y hasta de aportar para la jubilación!), sólo tienen como objetivo que los ricos sean más ricos y les trabajadores más pobres.

Por eso también defienden a la familia patriarcal: porque con las mujeres sumisas por el encierro doméstico y la dedicación a cocinar, limpiar, procrear y cuidar niños y ancianos, se ahorran pagar servicios de educación, salud, limpieza, y expulsan a más de la mitad de la humanidad de la esfera política, de la esfera de la construcción colectiva.

A su vez, niegan las identidades y acusan a las personas LGBT+ de pedofilia porque expresan la anti modernidad, lo anti científico. Son reaccionarios frente a las conquistas y los desarrollos materiales de nuestra sociedad. Ya existe un cambio en las relaciones humanas aunque Milei y los ideólogos de la extrema derecha quieran negarlo. La puja emancipatoria de las mujeres, la libertad de ser quien une quiera ser y poder vivir nuestra identidad y orientación sexual libremente son un hecho. La variedad de la experiencia humana se salió del molde de la familia tradicional y lo muestra más que nunca la juventud. Por eso atacan por todas las vías la ESI, la hormonización, el lenguaje inclusivo. Quieren retrotraer la historia de la humanidad.

Inmensas luchas del movimiento feminista y el movimiento LGBT + en todo el mundo cuestionan esta tendencia. Los dueños del capital y sus agentes serviles han tomado nota y buscan revancha. Porque, aunque hemos tenido importantes conquistas, ninguna es definitiva hasta que no terminemos con un sistema que tiene como razón de ser la búsqueda de la máxima ganancia. Por eso somos feministas y anticapitalistas: porque el patriarcado, la infernal desigualdad social y el cambio climático son las caras del capitalismo. Como bien dijo Rosa Luxemburgo: «La feminista que no es socialista, carece de estrategia. El socialista que no es feminista carece de profundidad».

¡Que se escuche nuestra voz en todas partes!

Al discurso de Milei hay que responderle en todas partes: en las escuelas, universidades, en los lugares de trabajo y en las calles. Por nuestra parte, junto a Manuela Castañeira, hemos hecho una campaña electoral anticapitalista y feminista: una campaña electoral con ideas y programa de frente a los desafíos que enfrentamos en todo el mundo. Igual que lo hacemos en las calles, todo el año, junto a las luchas del movimiento, pero también polemizando con los que nos quieren calladas. La estrategia del peronismo fracasó: siempre esperando alguna elección “salvadora”, sin propuestas para “no ahuyentar a la gente”.

Es momento de discutir otra estrategia: ganar las calles para defender la Ley de Identidad de Género, el Matrimonio Igualitario, la Ley del aborto libre, legar, seguro y gratuito, la ESI y enfrentar su campaña de odio que promueve femicidios y trans-travesticidios. Nuestro movimiento tiene que hacerse oír en todas partes: en la juventud tenemos que levantarnos y para eso es necesario discutir una estrategia: con asambleas, con acciones, con radios abiertas o documentos, pero sin callar la voz. Para quienes dicen que las feministas nos pasamos 3 pueblos, es pasandonos mil pueblos que vamos a poder defender nuestras conquistas y conquistar las que aún nos faltan. ¡A las calles contra este gobierno, junto a las luchas de los que enfrentan la miseria salarial, la reforma laboral, el cambio climático y la represión!

*Basta de femicidios y trans-travesticidios

*El aborto libre, legal, seguro y gratuito, la ESI y la Ley de Identidad de género ¡no se tocan!

*Al closet y al medioevo no volvemos nunca más

*Por una ESI laica, científica, feminista y no binaria obligatoria en todos los ámbitos educativos.

*No a la reforma laboral. *Por un salario mínimo de 2 millones.

*Por un movimiento feminista y LGBT+ de lucha en las calles solidario con las luchas obreras y populares