
Luego de cuatro asambleas, el paro internacional feminista en la Argentina corre el riesgo de dividirse.
Los debates en torno a la posición que debe adoptar el movimiento frente a la realidad del país se pueden resumir así: en torno a la lucha por el derecho al aborto y en torno a la deuda externa y el FMI. Hay dos posiciones claras, las que sostenemos que el proyecto de la campaña es el que se tiene que aprobar en el Congreso, y las que están dispuestas a apoyar el proyecto que va a presentar Alberto Fernández consensuado con la Iglesia, incluyendo la objeción de conciencia y otras concesiones para que los antiderechos se metan a impedir la realización del aborto, como ya lo hacen con el no punible (ILE).
Este debate se concretó alrededor de no movilizar de manera unificada el 8, mientras la Iglesia lanzó la provocación de misas ese día. Opusieron a esto “acciones territoriales”, en la práctica vaciar las calles. Por otro lado, frente a la propuesta de la izquierda de convocar a paro el lunes 9, exigiéndole a las centrales sindicales a que llamen y garanticen el paro, y una gran movilización a Plaza de Mayo, se negaron a que la asamblea exija el paro y pretenden que el movimiento marche a Congreso.
¡Pero ahora la cuestión no está en el Congreso! ¡Ahora la cuestión está en Plaza de Mayo! Porque es el gobierno el que va a presentar su proyecto, debilitando el de la campaña. Hoy hay que exigirle a Fernández que no presente un proyecto acordado con la Iglesia, sino que se apruebe el proyecto que tiene mayoría social, que ya está presentado. Por otro lado, una parte de la asamblea nos expresamos contra el pago de la deuda y por rechazar al FMI. Pagar la deuda es ajustar, como lo está haciendo el gobierno con las jubilaciones, con los salarios docentes y sacando la cláusula gatillo de las discusiones salariales. Negocia con el FMI para pagar. Los sectores afines al gobierno quieren que el movimiento feminista calle sobre el tema con formulaciones confusas, para quedar a la rastra del gobierno.
Hacia el final de la asamblea, cuando era claro que la mayoría estaba por marchar a la Plaza, las militantes de Patria Grande y otros sectores afines a Fernández, se llevaron el sonido y se retiraron de la asamblea.
¡En una actitud claramente anti democrática, sin aceptar la mayoría que se expresaba, rompieron la asamblea! ¡Todo porque quieren llevar detrás del gobierno al movimiento feminista!
¡Las Rojas decimos claramente que el movimiento hace rato se ganó el derecho a opinar y movilizarse con sus propias demandas, sin bajar las banderas para ir detrás de proyectos que son de concesiones permanentes a todos los antiderechos!
¡Por el aborto legal, nuestro proyecto es el de la campaña, que la iglesia no se meta! ¡No al ajuste, no al pago de la deuda, ruptura con el FMI!
¡8 y 9 Paro Internacional Feminista! ¡A la Plaza por nuestros derechos!