En el día lunes 20 de abril se vio por todos los medios del país la preocupación por el derrumbe del precio del barril de petróleo. Es que esta situación histórica pone en jaque el caballo de batalla para todos los gobiernos que significa Vaca Muerta, pero se ve que estos quieren hacer perder la batalla contra el Covid-19 a los trabajadores.
Ante esta situación la ministra de gobierno, seguridad y trabajo, Vanina Merlo, insinuó ante los medios una preocupación por no poder afrontar la liquidación de salarios estatales y los acuerdos salariales firmados de reajuste por IPC firmado a principios de Marzo, como así también el pago de la ropa de trabajo estipulado en el CCT, refugiada detrás del parate económico que conlleva la cuarentena y la actual crisis económica.
Creemos que es momento de estar en alerta en todos los sectores de las y los estatales, debemos exigir y demandar a nuestros sindicatos un plan de lucha en caso de que todo esto que hoy se presenta como una posibilidad se logre concretar.
El gobierno en sus declaraciones no está garantizando los salarios de las/os estatales con el argumento de no contar con la recaudación suficiente, haciéndonos creer que la plata no está, pero la plata esta y la tienen guardada las patronales que viven de los millones que el sudor de los trabajadores les hacen ganar y que hay que poner esa plata donde los/as trabajadores necesitemos, no en los bolsillos de los buitres que quieren el pago de la deuda externa o guardada en las cuentas de los grandes millonarios del país y multinacionales.
La situación empeora día a día, el golpe al bolsillo de las y los trabajadores es cada vez más grande en este contexto de crisis sanitaria y económica que se vive a nivel mundial. El incremento y la constante remarcación de precios en alimentos, productos de limpieza y desinfección que hoy utilizamos más que nunca nos llevan a una gran cantidad de familias a no lograr llegar a fin de mes con nuestros sueldos.
El sector salud, la primera línea hoy de combate ante la amenaza del COVID-19, ya se ha declarado en estado de alerta por las repercusiones de lo que en las últimas horas el gobierno provincial estaría declarando una eventual situación en la que no podrá afrontar los compromisos firmados en las últimas mesas salariales y el bono de cinco mil pesos que tiene que poner el gobierno.
Desde la corriente sindical 18 de diciembre creemos que es momento de solidarizarse y acompañar cada reclamo, tanto del sector salud, como los demás sectores estatales. Nos encontramos hoy en la misma situación, y es momento de decir ¡basta! Ya suficiente tormento soportamos los últimos años de gobiernos que priorizan las ganancias de los empresarios y las timbas financieras. No podemos permitir que todo el peso de esta crisis caiga sobre la espalda de las y los trabajadores.
Hay que hacer cuarentena para no infectarse pero no se puede mantener una cuarentena con hambre y necesidades, si el gobierno no cumple con los salarios y los aumentos acordados seguramente los compañeros y compañeras no se van a quedar sentados mirando como su hijo/a tiene el plato vacío sobre la mesa. Saldrán a la calle como los obreros del Frigorífico PENTA en Buenos Aires que ante el no pago de salarios movilizan el miércoles a Plaza de Mayo, con barbijos, alcohol en gel y con distanciamiento, pero luchando por lo que es justo.
¡Que se cumpla con el acuerdo salarial por IPC!
¡Pago de Ropa de Trabajo!
¡Pago de Promocion Horizontal!
¡QUE LA CUARENTENA NO LA ROMPA EL HAMBRE¡